Destacados dirigentes del PSOE piden cuentas a Rubalcaba

A pesar de que el PSOE ha asegurado tras el 21-O y de forma oficial que no se piensa en la dimisión de Rubalcaba,  el grupo socialista ha registrado desde la noche del pasado domingo valoraciones de destacados dirigentes pidiendo reflexión, cambios, catarsis y una cuestión inapelable para José María Barreda: "Vamos de desastre en desatre... La gente no nos quiere".

En este sentido, la urgencia de Ferraz pasa ahora por acortar los tiempos, según ha asegurado la vicesecretaria del PSOE, Elena Valenciano, quien en un acto de contrición reconocía este lunes que "no han sabido movilizar a la ciudadanía que cada vez está más alejada" y, en "intensificar la alternativa", apunta este martes Óscar López.

Cuando uno está en el fondo

Pero Barreda ha sido explícito después de escucharse las voces críticas de Tomás Gómez, Griñán, Odón Elorza o López Aguilar. El castellano-manchego muestra recelo ante esta imagen de unidad que la dirección del partido intenta transmitir e interpreta las palabras que arengan al cambio como cantos de sirena. "A veces da la impresión de que algunos, estando ya en el fondo, siguen cavando", apostilla el expresidente manchego.

La capacidad de autocrítica del expresidente de C-LM no es exclusiva. Desde los más apocalípticos como el jefe de los socialistas españoles en el Parlamento Europeo, Juan Fernando López Aguilar, que ve en la pérdida de poder político "la peor situación del partido en 35 años", hasta los que sin ambages responsabilizan a Rubalcaba de lo ocurrido solicitando su dimisión como la exministra socialista de Vivienda María Antonia Trujillo.

Gómez, Griñán... Vara

Tomás Gomez, azote de Rubalcaba, incita a los socialistas a hacer "reflexiones profundas y serias porque habrá que hacer cambios profundos y serios". Con todo, ha rehusado por el momento mostrar su rechazo explícito al líder socialista.

Uno de los protagonistas del 'desastre', el candidato a al Xunta de Galicia, Pachi Vázquez, hacía un llamamiento de filas a "la reflexión y a continuar con el trabajo" nada más conocerse la pérdida de siete de los 25 escaños que el PSdG tenía en el parlamento gallego.

Peor fue el resultado en el País Vasco donde Patxi López en tres años y medio al frente de la lehendakaritxa pasó de una mayoría de 26 diputados a ser la tercera fuerza política en Euskadi con 16 escaños.

En este contexto, José Antonio Griñán -a quien algunos círculos postulan como pinza de Chacón- se erige como salvador de la esencia socialista y advierte de que "a partir de ahora se va a ver la presencia de Andalucía en el debate político nacional". Además, el dirigente andaluz dibuja en su agenda la necesidad de "hacer un análisis más profundo en el seno de la Ejecutiva Federal".

Guillermo Fernández Vara, por su parte, considera que en la situación actual si el PSOE presenta "un proyecto alternativo a lo que representa la derecha en España, lo del candidato no es tan importante". Además, remarca, ante la situación actual, y tras los resultados de las elecciones electorales en Galicia y País Vasco, es necesario abrir un debate en el seno del PSOE, de carácter "ideológico, y no un debate de personas".