Política

Landaburu, a ETA: "Habéis errado, no me habéis cortado la lengua"



    "Soy periodista, me habéis destrozado las manos, me habéis dejado ciego del ojo izquierdo, pero os habéis equivocado, no me habéis cortado la lengua", ha dicho el periodista.

    El periodista Gorka Landaburu aprovechó su declaración en el juicio contra los etarras Oskarbi Jauregi y Xabier Macazaga, a los que se acusa de intentar acabar con su vida con un atentado con paquete-bomba, para dirigirse a ETA: "Soy periodista, me habéis destrozado las manos, me habéis dejado ciego del ojo izquierdo, pero os habéis equivocado, no me habéis cortado la lengua, nunca me vais a echar de mi país".

    El periodista aseguró que, a pesar del atentado que sufrió el 15 de mayo de 2001, ha decidido quedarse en Euskadi "peleando por la libertad y por la paz".  Landaburu, que rechazó declarar como testigo protegido y lo hizo frente al tribunal en el centro de la sala de vistas, no tuvo reparos en cruzar su mirada con los acusados antes de deponer. 

    El cruel relato de los hechos

    La víctima también tuvo tiempo para explicar cómo tuvo lugar el atentado. Señaló que, cuando se recibió el paquete-bomba, compuesto por unos 100 gramos de titadyn, él se encontraba en Bilbao, donde había estado cubriendo las elecciones del País Vasco

    El 15 de mayo volvió finalmente a su domicilio en Zarautz (Guipúzcoa), donde pasó la mañana solo, ya que su mujer estaba trabajando y su hijo estudiando. Tomó una ducha en su despacho y, cuando salió desnudo en busca de una toalla, reparó en el paquete que había encima de su mesa.  No sospechó del paquete porque los etarras habían estampado el logotipo de Elkargi, una entidad cuya publicación recibía periódicamente.  "Abrí el sobre, me explotó y dije 'me han pillado'", explicó el periodista en la Audiencia Nacional.  Landaburu no perdió la conciencia, por lo que bajó de su domicilio, se miró en el espejo, y tuvo tiempo de acercarse a la casa de un primo que vivía en el vencindario, al que solicitó que pidiese una ambulancia.

    23 años de cárcel

    La Audiencia Nacional juzga desde las 10.30h a los etarras Oskarbi Jauregi y Xabier Macazaga, a los que se acusa de ser los autores materiales del atentado con paquete-bomba contra el periodista Gorka Landaburu, que tuvo lugar 15 de mayo de 2001.

    El fiscal encargado del caso, Luis Barroso, pedirá sendas penas de 23 años de cárcel para Macazaga y Jauregi, a los que atribuye delitos de asesinato terrorista en grado de tentativa y de tenencia y transporte de aparatos explosivos.

    El juicio, que correrá a cargo de la Sección Segunda de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional, se inicia este jueves a las 10.30 horas y está previsto que se extienda hasta el viernes.

    El escrito de la Fiscalía señala que los dos acusados, junto a la también etarra Ainhoa García Montero, quien no se sentará en esta ocasión en el banquillo de los acusados, formaba el comando Buruntza de ETA.

    Los terroristas confeccionaron en el piso franco que tenían en Zizurkil (Guipúzcoa) un libro-bomba con un sistema trampa que, al abrirse, activaba la carga explosiva, unos 100 gramos de titadyn. En el sobre estamparon el logotipo de la revista de la plataforma Elkarri.

    Vigilancias sobre el periodista

    De forma complementaria, los etarras realizaron vigilancias sobre el periodista, director de Cambio 16, y su domicilio en Zarautz (Guipúzcoa). Según el escrito del fiscal, Jauregi se desplazó hasta Zarautz y depositó el paquete en el buzón del domicilio del periodista.

    El escolta de Landaburu recogió el paquete sobre las 20.20 horas del 14 de mayo de 2001 y no sospechó de él porque llevaba impreso el logotipo de Elkarri, a cuya revista estaba suscrito el periodista. Al día siguiente, sobre las 10.20 horas, Landaburu abrió el paquete y se produjo la explosión, provocándole graves heridas por las que tuvo que ser intervenido de urgencia.

    El atentado fue reivindicado por ETA a través de un comunicado publicado en el diario Gara el 26 de julio. Macazaga y Jauregi fueron detenidos el 22 de agosto de 2001 en Guipúzcoa por la Ertzaintza.

    Además de las penas de cárcel, el fiscal Barroso pide que Jauregi y Macazaga indemnicen con 347.850 euros al periodista por las heridas y secuelas sufridas. También solicita que se imponga a los terroristas la prohibición de acercarse a Landaburu y acudir a la localidad de Zarautz por un periodo de cinco años tras cumplir la condena.