Política
El Rey don Juan Carlos se recupera en el Palacio de la Zarzuela de su operación
El Rey se encuentra ya en el Palacio de La Zarzuela en buen estado de salud después de que haya sido intervenido quirúrgicamente esta madrugada de una rotura del tendón de Aquiles izquierdo en el Hospital USP San José (Madrid), según ha informado la Casa Real.
Reparación del tendón de Aquiles
La intervención, que se ha llevado a cabo con éxito por el doctor Ángel Villamor, director de la Unidad de Traumatología y Recuperación avanzada de este centro y Director Médico de la Clínica iQtra, se ha realizado bajo anestesia epidural y ha consistido en la reparación de dicho tendón mediante cirugía abierta de reconstrucción y refuerzo con auto-injerto y plasma rico en factores de crecimiento.
Según informaron a Europa Press fuentes de la Casa Real el pasado 1 de septiembre, durante una cena a la que asistió a principios del pasado agosto en el club náutico de Palma de Mallorca, don Juan Carlos sintió un dolor en la pierna izquierda, tras lo cual sus médicos decidieron inmovilizarla con una bota ortopédica especial, con la que se le pudo ver durante la visita del Papa Benedicto XVI a mediados de ese mes.
Hace tres meses, el Rey ya fue intervenido para que se le implantara una prótesis en la rodilla derecha. En aquella ocasión, el monarca estuvo hospitalizado varios días, tras lo cual tuvo que hacer sesiones de rehabilitación durante algunas semanas, razón por la que se le ha visto este verano en varias ocasiones utilizando muletas.
Menos tiempo de recuperación
La técnica empleada ha sido cirugía abierta de reconstrucción y refuerzo con auto-injerto y plasma rico en factores de crecimiento, que permite acortar "incluso a la mitad" el tiempo de recuperación del paciente y evita las recaídas ya que "mejora la calidad de la reparación de los tejidos dañados".
Así lo ha asegurado en declaraciones a Europa Press el médico estomatólogo Eduardo Anitua, director científico del BTI Biotechnology Institute, centro pionero en España en el uso de esta técnica para la mejora y aceleración de los procesos de curación.
En concreto, con la aplicación del plasma rico en factores de crecimiento se consigue imitar y acelerar los mecanismos fisiológicos de reparación que se ponen en marcha espontáneamente en todos los tejidos tras una lesión, ya sea causada por un traumatismo, un tratamiento quirúrgico o una enfermedad.
Lo que se logra es la sustitución de tejido destruido o deteriorado por tejido nuevo, de forma natural, pero en mucho menos tiempo que con los tratamientos tradicionales, a partir de pequeñas concentraciones de plasma sanguíneo obtenido por centrifugación de sangre del propio paciente.
Evita reacciones alérgicas o rechazos
Además, según explica, al tratarse de un tratamiento con el plasma del propio paciente nunca se desarrolla una reacción alérgica o rechazo hacia el tratamiento.
En una lesión tendinosa como la que padecía el Rey, el doctor Anitua reconoce que la recuperación puede variar en función de la edad, el grado de la lesión y la capacidad de respuesta del paciente, pero en este caso, confía en que pueda hacer vida normal "en menos de tres meses".
Igualmente, esta técnica también permite "reducir prácticamente al mínimo las probabilidades de recaída", como así ha demostrado la experiencia clínica con deportistas de élite.
"El factor más importante no es que se haga más rápido sino que se haga mejor", según Anitua, quien ha destacado la importancia de que esta técnica se haya desarrollado en España, donde se comenzó a utilizar a finales de los años 90.