País Vasco

BBK se sacrifica para que salga adelante la fusión vasca de cajas

    Foto: Irekia


    Lo consejos de administración de las tres cajas de ahorros vascas lograron ayer aprobar el proyecto de fusión, a través de la aportación de su negocio financiero y participaciones industriales a 'Kutxa Bank S.A.'. Para que el acuerdo fuera posible la caja de mayor tamaño y rentabilidad, BBK, ha tenido que ceder peso en el control accionarial de la nueva entidad. La caja vizcaína controlará el 57% del nuevo banco, Kutxa el 32% y Vital el 11%.

    Los estudios de valoración de AFI atribuían a BBK una media del 62 por ciento del capital del nuevo banco, pero se ha conformado con controlar el 57 por ciento para evitar que la fusión fracasase en la guipuzcoana Kutxa y la alavesa Caja Vital, que gracias a ello controlarán un 33 y 11 por ciento respectivamente del nuevo banco. Para compensar, en materia de decisiones estratégicas, será necesario en el consejo siempre el acuerdo de dos cajas y que una de ellas sea BBK.

    La fusión deberá ser ratificada por las asambleas de las cajas en septiembre, para empezar a operar en enero de 2012. A pesar de que los consejos la aprobaron ayer, su camino aún no está despejado, ya que hasta ahora en Kutxa no está garantizada la mayoría cualificada de la asamblea necesaria para su ratificación. En previsión de que pudiera truncarse de nuevo en el último minuto, el acuerdo suscrito ayer entre BBK, Kutxa y Vital, contempla que si alguna de las entidades no logra la aprobación, las otras continuarán con la integración. En el consejo de Kutxa la fusión recibió 4 votos en contra y en BBK uno.

    Un mal menor

    La cesión parcial de BBK en el control del nuevo banco responde a que sin fusión sus planes de crecimiento se verían muy debilitados, ya que aunque tiene un fuerte excedente de capital para crecer en solitario, este camino hubiera sido mucho más lento y más caro, teniendo que absorber en solitario entidades, que en la segunda fase de la reestructuración del sector, estuvieran muy debilitadas y sin saber si habrá ayudas públicas para saneamientos adicionales.

    Además, la no fusión dejaría a Caja Vital y Kutxa en una difícil encrucijada económica por su pequeña dimensión, lo hubiera provocado un problema político en el seno del PNV, ya que éstas tendrían que plantearse uniones con cajas de otras Comunidades Autónomas.

    Presidencia de BBK y triplicar beneficios

    Kutxa Bank nacerá con unos activos de 75.000 millones, situándose como la 4ª caja y la 8ª entidad financiera, con un ratio de capital del 12,8 por ciento.

    Este nivel de activos podrá tener mucha mayor proyecciónd e crecimiento, si como explicase en junio pasado Mario Férnandez en una conferencia en Santander, quieren alcanzar los 150.000 millones, patra lo cual tras asentar la fusión no descartan aprovechar las oportunidades que se presente en la segunda fase de la reordenación del sistema financiero español.

    El nuevo banco, en su planteamiento actual (resultado de la suma de BBK, CajaSur, Kutxa y Caja Vital), considera que tendrá gran potencial de crecimiento lo que le permitirá casi triplicar sus beneficios en cinco años, pasando de los 380 millones en 2010, a cerca de 846 millones en 2015.

    La presidencia ejecutiva de Kutxa Bank recaerá en BBK y habrá dos vicepresidencias, la primera para Kutxa y la segunda para Vital. El consejo de administración estará compuesto por 20 personas, 12 designadas por BBK, 6 por Kutxa y 2 por Caja Vital.

    La sede financiera del nuevo banco estará en Bilbao, estableciendo otras secundarias, una de Actividad de Medios y Recursos en Donostia-San Sebastián y otra de Cumplimiento normativo, Coordinación de actividades de Obra Social y Relaciones Institucionales en Vitoria-Gazteiz en San Sebastián y Vitoria.

    El plan de fusión estima que se producirán sinergias de 100 millones por 'ahorros recurrentes', a través de la optimización de la red de oficinas y sus servicios centrales; así como los sistemas de información y la plataforma tecnológica. Además, se obtendrán economías de escala por agregación de volúmenes de compra y por la homogeneización de políticas y procesos.

    La información difundida ayer no hace mención directa a alguna a las repercusiones en el personal de la nueva entidad, que en conjunto da empleo a más de 9.000 personas, pero en las dos reuniones previas de la Mesa Laboral las cajas no pudieron asegurar que no se fueran producir reducciones de plantilla, sólo que éstas se canalziarían bajo medidas no traumáticas.

    La Obra Social de las cajas, cuyos fondos procederán del reparto de beneficios que genere el banco, también aumentará de los 105 millones en 2010 los 245 millones en 2011, lo que equivale al 30% del beneficio obtenido. Los fondos de obra social serán gestionados por las cajas que perviven en cada territorio con tal fin.

    Ventajas para clientes y empresas

    La nota difundida por Caja Vital destaca las ventajas que la fusión tendrá también para los clientes, tanto particulares como empresas; y para el desarrollo de la economía vasca.

    Así recalca que Kutxa Bank 'asumirá el papel de referente económico y de motor del desarrollo del país y de su necesaria contribución al progreso de la sociedad vasca mediante la creación de valor económico y valor social'.

    Su mayor dimensión permitirá al banco 'participar de los proyectos de creación de nuevas infraestructuras' estratégicas para el País Vasco necesitadas 'necesitadas de enormes recursos para su puesta en marcha'. Además dispondrá de 'mayor capacidad de inversión y de financiación de proyectos empresariales' para prestar un mayor apoyo al tejido industrial. Esto les permitirá colaborar con las empresas en sus planes de crecimiento y de internacionalización 'facilitándoles el soporte financiero y los servicios de apoyo a la gestión que precisen a través de su área especializada en servicios internacionales'.