Tubacex afronta 2020 con 16 fábricas, acuerdos comerciales y una reestructuración

Tubacex confía en el posicionamiento logrado en los últimos cuatro años para afrontar la crisis ocasionada por el coronavirus. La diversificación de productos, acuerdos comerciales y su perímetro de 16 compañías serán sus principales bazas para la recuperación, aunque no descarta una reestructuración, "si el mercado se complica".

El Presidente del Consejo de Administración de Tubacex, Álvaro Videgain, y el Consejero Delegado, Jesús Esmorís, han destacado en la Junta General de Accionistas, que la estrategia del grupo en productos 'premium', las compras de compañías en India, Italia, Tailandia, etc, y los acuerdos comerciales alcanzados en esos mercados, serán su 'colchón' para afrontar la recuperación de la actividad.

Así, la integración del Grupo NTS con plantas en Noruega, Arabia Saudí o Dubai, o la construcción de una nueva planta en Estados Unidos, le permite contar con 16 fábricas y 16 centros de servicios en todo el mundo, lo que ha supuesto una mayor diversificación de sus productos y de los sectores donde opera: gas, aeroespacial, automoción o generación de energía, entre otros.

Caída de la demanda

No obstante, el impacto del Covid-19 en su actividad está siendo y será grande, ya que se han anunciado reducciones cercanas al 40% en los proyectos de inversión de dichos sectores, así como en los proyectos de diseño y desarrollo, lo que se traducirá en una caída importante de la demanda en todos los mercados.

"Tubacex está afrontando la situación gracias a su solidez financiera y poniendo en marcha una serie de medidas basadas en la reducción de costes y en la protección y fortalecimiento de la posición de caja", ha explicado Esmorís, "lo que no descarta un plan de choque que exige una importante reestructuración en los próximos meses".

El productor de tubos sin soldadura en acero inoxidable se encuentra actualmente a la mitad de su capacidad, aunque en sus instalaciones en India están al 100%. El grupo suma 2.500 trabajadores repartidos en dieciséis plantas en nueve países, 600 de ellos en Llodio y Amurrio, ambos en Álava, fábricas que estarán en Erte hasta octubre.

Tubacex cerró el ejercicio 2019 con unas ventas de 613,5 millones de euros y un ebitda de 67,1 millones de euros, resultado en línea con el obtenido en 201, a pesar de paralizarse un importante pedido de OCTG para Irán ante las sanciones impuestas por Estados Unidos. El beneficio ascendió a 11 millones.

Para el objetivo 2020, las previsiones apuntaban a un negocio de 800 millones, cifra que queda descartada por el Covid-19 y a la que no se atreven a poner números. "Hemos diseñado tres posibles escenarios y en los tres habrá pérdidas, sin duda", ha asegurado Jesús Esmorís.

El grupo no repartirá dividendo con cargo al ejercicio 2019. Como parte del compromiso de remuneración al accionista de Tubacex, el Consejo de Administración ha puesto en marcha un programa de recompra de acciones para su posterior amortización por un importe total de 6 millones de euros.