Otros deportes

Las obras en el Maracaná empiezan con retraso pero el estadio se mantendrá abierto



    Río de Janeiro, 24 ago (EFE).- Las obras de reforma del legendario estadio Maracaná, de Río de Janeiro, empezaron hoy con el objetivo de preparar el recinto para el Mundial de fútbol de 2014, que se jugará en Brasil, con un mes de retraso en el cronograma oficial marcado por la FIFA.

    Los operarios empezaron a retirar hoy los asientos azules situados en la grada inferior del estadio, ante la mirada de la secretaria de Turismo, Deporte y Ocio y Obras del estado de Río de Janeiro, Marcia Lins.

    El Estadio Periodista Mario Filho, popularmente conocido como 'Maracaná', fue inaugurado en 1950 con motivo del Mundial organizado por Brasil y el 16 de julio de ese año fue escenario del célebre 'maracanazo', cuando los anfitriones cayeron en la final por 2-1 ante Uruguay.

    El estadio, que en aquella ocasión albergó a más 200.000 hinchas, tiene actualmente un aforo 82.238 espectadores y se espera que sea la sede de la final del Mundial de 2014.

    Los trabajos de reforma prevén la retirada durante treinta días de todos los asientos azules, que ocupan la parte inferior de la grada, a un ritmo de más de mil lugares por día.

    Una vez el piso inferior del estadio esté vacío, la estructura de gradas será demolida y construida de nuevo.

    Las autoridades pretenden mantener el estadio abierto durante las obras aunque los partidos sólo podrán verse desde los asientos verdes, amarillos y blancos del nivel superior, lo que reducirá el aforo del estadio a la mitad.

    Para el partido entre el Flamengo y el Atlético Mineiro, programado para el próximo jueves, se pondrán a la venta 39.512 localidades de las más de 80.000 habitualmente disponibles.

    El consorcio de empresas que ejecuta las obras de mejora se ha comprometido a mantener el cronograma de la FIFA, que prevé la finalización de los trabajos para diciembre de 2012.

    Dentro de 50 días, las autoridades valorarán la evolución de los trabajos y será entonces cuando se establezca la fecha de cierre del estadio para concluir las obras, una decisión que viene posponiéndose desde principios de este año.

    La reforma del Maracaná es uno de los doce proyectos de reforma o construcción de estadios previstos por el comité brasileño del Mundial 2014 y también el más caro, tasado en unos 705 millones de reales (unos 397 millones de dólares).

    Además de demoler el sector de asientos azules para crear una nueva grada, el proyecto también prevé la extensión el techo del Maracana para cubrir todas las localidades y la sustitución de los palcos situados sobre la grada superior para aumentar el número de localidades.

    La reforma también pretende devolver el tono grisáceo original al estadio, que ahora luce un aspecto blanquecino, y modernizar las instalaciones en el interior, afectadas por el paso del tiempo y por las inundaciones del pasado mes de abril en Río de Janeiro, que cubrieron de lodo la parte de los vestuarios.