Opinión
La digitalización en la Comunitat Valenciana: un camino hacia la convergencia
Laura Hernández, economista del Ivie
En un mundo cada vez más digital, las economías regionales se enfrentan al reto de adaptarse a la nueva realidad tecnológica. En España, la digitalización avanza a ritmos diferentes según la región, con Madrid a la cabeza, seguida de Cataluña y el País Vasco. La Comunitat Valenciana, aunque todavía por debajo de la media nacional en intensidad digital, está logrando cerrar la brecha gracias a un crecimiento sostenido en los últimos años.
En 2023, Madrid destacaba con un 30,3% de su actividad económica vinculada a la digitalización, mientras que Cataluña y el País Vasco se situaban en el 22,8% y 22,1%, respectivamente, según la última edición del estudio La economía digital en España, elaborado por la Fundación Cotec y el Ivie. La Comunitat Valenciana, en cambio, se encuentra en un grupo intermedio junto a La Rioja, Navarra, Galicia, Andalucía y Asturias, con una penetración digital de entre el 17% y el 20%. Aunque este porcentaje es menor que la media nacional (21,5%), su crecimiento entre 2011 y 2023 es superior, lo que indica un proceso de convergencia con las regiones más avanzadas. Sin embargo, persisten desafíos como la menor capacidad de atracción de talento digital por sus salarios digitales más bajos, factor que podría ralentizar su avance.
El avance tecnológico supone una oportunidad para mejorar la eficiencia de las empresas y la administración pública, favoreciendo la innovación y el desarrollo de nuevos modelos de negocio. Sin embargo, la digitalización también conlleva desafíos, como la necesidad de formación continua para los trabajadores, la incorporación de talento digital y la adaptación de las empresas, y en particular las pymes, a las nuevas herramientas digitales. En este contexto, analizar la evolución de la Comunitat Valenciana en este ámbito es clave para entender su capacidad de adaptación y proyección futura.
Contribución al crecimiento
El crecimiento económico de las comunidades autónomas entre 2011 y 2023 ha estado impulsado principalmente por la acumulación de factores no digitales. Por su parte, la contribución de los factores digitales ha sido positiva en todas las regiones. En el caso de la Comunitat Valenciana, se sitúa como la cuarta región donde más han impactado los factores digitales en el crecimiento del PIB, aunque algo por debajo del promedio español (0,37 puntos porcentuales, frente a 0,39 del conjunto nacional). La contribución del capital y del trabajo es positiva en todas las regiones, situándose la Comunitat Valenciana en el grupo de aquellas donde mayor contribución realizan ambos.
Sin embargo, la Comunitat Valenciana todavía presenta una brecha en su participación en el Valor Añadido Bruto (VAB) digital en comparación con el promedio nacional. En 2023, este representaba el 18% del VAB total, 3 puntos por debajo de la media. Esta diferencia se explica en gran parte por el peso de Madrid, Cataluña y País Vasco, que elevan el promedio español. A pesar de ello, la Comunitat Valenciana ha experimentado un crecimiento sostenido en la última década, reduciendo progresivamente esta diferencia y convergiendo hacia regiones más avanzadas.
Digitalización y brecha salarial
El empleo digital en la Comunitat Valenciana representa el 17,2% del empleo total, del que 8,4 puntos porcentuales corresponden a especialistas digitales y 8,9 puntos porcentuales a empleados digitales no especialistas. Esto sitúa a la región en la novena posición en el ranking nacional según la intensidad digital del empleo. Destaca especialmente el sector de Información y Comunicaciones, donde el 82% del empleo es digital, por encima del 78,1% de la media española.
A pesar de estos avances, la prima salarial de los especialistas digitales en la Comunitat Valenciana es sensiblemente menor que la media nacional. En 2023, estos profesionales ganaban un 32,8% más que el salario medio regional, frente al 42,8% de prima que obtenían en el total nacional, lo que indica una menor rentabilidad relativa del empleo digital en la región y una menor capacidad de atracción de talento digital. Resulta interesante también observar que no existe una relación entre el nivel salarial general de las regiones y su prima salarial a los especialistas digitales.
Retos y oportunidades
La digitalización en la Comunitat Valenciana avanza con paso firme, aunque todavía con diferencias respecto a las regiones líderes. La clave para seguir cerrando esta brecha radica en fomentar la inversión en tecnología, potenciar la formación en competencias digitales y mejorar la calidad del empleo digital. Si la región mantiene su actual ritmo de crecimiento, podría consolidarse como un polo de digitalización y competitividad en el futuro cercano.
Para alcanzar este objetivo, es necesario fortalecer la colaboración entre el sector público y privado, promoviendo incentivos para la adopción de tecnologías emergentes y el desarrollo de infraestructuras digitales avanzadas. Además, se debe apostar por la educación y la formación continua para garantizar que la población activa pueda acceder a empleos de mayor valor añadido en el sector digital.
Por otro lado, es fundamental abordar la brecha salarial y mejorar la rentabilidad del empleo digital en la Comunitat Valenciana. De lo contrario, la formación y el gasto en digitalización generaría profesionales que acabarían desplazándose a otras regiones con mayores salarios. Para ello, se deben potenciar estrategias como la atracción de empresas tecnológicas de alto valor añadido, la mejora de las condiciones laborales en el sector y el fomento de la especialización en nichos tecnológicos estratégicos. A su vez, se deben desarrollar políticas que incentiven la retención del talento digital en la región, evitando la fuga de profesionales hacia comunidades con mejores condiciones salariales.
En este contexto, el reto para la Comunitat Valenciana no solo es incrementar la penetración digital, sino también garantizar que esta transformación se traduzca en una mejora efectiva del bienestar y la calidad del empleo para su ciudadanía. Si logra consolidar estos avances, podrá posicionarse como una región clave en la digitalización de la economía española, impulsando su crecimiento y competitividad en los próximos años. Además, al reducir la brecha digital y aumentar el impacto positivo de la tecnología en su economía, podrá reforzar su atractivo como destino para la inversión y la innovación tecnológica, consolidando un modelo de desarrollo sostenible basado en la digitalización y la transformación económica.