Opinión

Agricultura, producir más con menos o desaparecer

  • Un 12% de la emisión de gases invernadero tiene su origen en este sector
  • España es líder en inversión Agrotech, proyecto que engloba la inversión digital del sector

Ricardo Jiménez

España siempre ha sido pionera en agricultura. En el Al-Andalus se escribió en el siglo XII "El libro de la agricultura" de Al Awam, donde se explican una serie de técnicas agrícolas, adaptación de nuevos cultivos, uso del agua y nueva maquinaria que habían dado lugar a la llamada revolución agrícola musulmana a partir del siglo VII.

Mil años después la agricultura sigue en plena transformación. Esta revolución está impulsada por tres grandes desafíos, asegurar la alimentación a una población mundial que alcanzará los 9.700 millones en 2050, la urgencia de reducir su impacto medioambiental y el hecho de contar con menores extensiones cultivables y una menor mano de obra dispuesta a trabajar en este sector. Factores que inciden en una menor producción y un aumento de precios finales.

Se estima que un 12% de la emisión de gases invernadero tiene su origen en la agricultura. La cadena alimenticia en su conjunto, desde la cosecha hasta su consumo final alcanza el 30%. Según datos recogidos en el informe Armanext sobre el sector AgroTech la agricultura es responsable de un 70% del consumo de agua en la tierra. La mayor frecuencia de eventos climáticos extremos genera nuevas condiciones que reducen la productividad y certeza de las cosechas.

La respuesta a estos retos se encuentra en el conjunto de innovaciones tecnológicas, que son aplicadas a la agricultura, ganadería y pesca. El término AgroTech engloba herramientas avanzadas como Big Data, Inteligencia Artificial, drones, o robótica para la automatización de tareas.

La innovación se produce en toda la cadena de valor. Desde empresas como John Deere en maquinaria con el lanzamiento de tractores autónomos, a IBM en programas de análisis predictivo y previsión atmosférica. Walmart la mayor cadena de supermercados en Norteamérica vende en sus tiendas productos vegetales de cultivo vertical. Estos cultivos dentro de naves industriales consumen un 95% menos agua, un 99% menos de tierra y cero pesticidas, según datos de Aerofarms, empresa basada en New Jersey.

La digitalización del sector afronta desafíos como la necesaria inversión y formación inicial, un obstáculo para pequeños y medianos agricultores. La progresiva autonomía de la maquinaria agrícola hace que estos sean más dependientes para actualizaciones del software. El limitado acceso a internet es un problema en zonas rurales y países con menor desarrollo.

En España, vivimos una situación asimétrica entre la evolución de la agricultura y la de las empresas AgroTech. En las últimas dos décadas, los afiliados al Sistema Especial Agrario han caído aproximadamente un 25%, según los datos de la Seguridad Social. El tamaño medio del casi millón de explotaciones agrarias es de 26 hectáreas, frente a las 450 en Europa o las 3.500 en Estados Unidos. Es difícil rentabilizar la inversión en tecnología y esto va generando la lenta muerte del campo español.

Países Bajos muestra el camino a seguir. Un país pequeño, con escasos recursos naturales se ha convertido en el segundo exportador mundial de alimentos. Con aproximadamente 1,8 millones de hectáreas utilizadas para la agricultura, en 2023, realizaron exportaciones por valor de 122.300 millones de euros, casi el doble que España que cuenta con 23,9 millones de hectáreas, trece veces más de superficie cultivada.

El éxito neerlandés reside en la adopción de tecnologías avanzadas para optimizar la producción de alimentos y minimizar recursos. Otro pilar es la Wageningen University & Research (WUR), considerada la principal institución de investigación agrícola del mundo. Solo en 2022 la inversión en startups holandesas de tecnología agrícola alcanzó los 700 millones de euros.

Otro riesgo para España es la competencia de países con menores regulaciones y costes. Marruecos ha aumentado casi un 50% sus exportaciones de productos vegetales y frutas a la Unión Europea desde 2019.

La situación respecto a empresas digitales agrarias muestra un sector de enorme dinamismo. España se posiciona como líder europeo en AgroTech, tanto por número de empresas, más de ochocientas, como por el número de tecnologías en desarrollo. El 60% de las empresas digitales agrarias han sido creadas hace menos de 5 años. Cerca del 50% de las compañías nacen en la zona del el Mediterráneo. En el otro lado se encuentran Extremadura, Castilla La Mancha y Navarra o La Rioja, con apenas un 2% de presencia en la industria.

La mayoría son empresas muy pequeñas que necesitan capital para seguir creciendo. Seaya Ventures, a través de Andromeda, el mayor fondo de capital expansión del Sur de Europa, ha tomado recientemente una participación mayoritaria del 55% en Nax, empresa alicantina dedicada a la generación de modelos predictivos con imágenes satelitales.

La aportación de musculo financiero permite la transferencia de tecnología y el poder responder a las necesidades de la gran distribución con lo que ello supone de escalabilidad del negocio. La capacidad de inversión permite un mejor uso de los recursos escasos, mejorando también los perfiles de empleo y asegurando el arraigo de la población.

Solo la inversión en tecnología permitirá cultivar el futuro.