Merkel debe dejar a un lado la austeridad
THE ECONOMIST (REINO UNIDO)
La decisión de Grecia de elegir al partido de izquierda Syriza de Alexis Tsipras podría tener tres posibles consecuencias para la zona euro: la buena, la desastrosa, o un compromiso que podría allanar el camino. La victoria de Syriza puede suponer una oportunidad para renegociar la deuda griega, pero solo si Tsipras aparta su socialismo sin sentido. En cualquier caso, debe realizarse un ejercicio de pragmatismo por todos, especialmente, por la canciller alemana Angela Merkel. Si continúa oponiéndose a todos los esfuerzos para impulsar el crecimiento y desterrar la deflación en la zona euro, condenará a Europa a una década perdida incluso más aguda que la japonesa en los 90. Si ese escenario se materializa habrá una reacción populista aún de más envergadura y a escala de toda Europa.