Opinión

Ojo con el rebote del gato muerto



    Ahora le sugiero que tome el rebote que pueda venir como una nueva oportunidad para reducir el riesgo.

    Insistiré una vez más en mi fe y mi compromiso con la renta variable a largo plazo. Lo retomé en 2009 y no está en mi plan vital poner fin a ello por motivos que he contado aquí y que no puedo estar recordando cada semana si quiero hablar del momento. Es algo que nunca dejo de mostrar en los eventos que vamos haciendo durante el año por España. Intento que la gente deje de pensar en la bolsa del modo en el que ha llegado a pensar por una lateralidad que empezó en 1998 para muchos activos. Una lateralidad que quedó atrás, confirmando mi escenario C de Barack -expuesto a finales de 2008 y activado en marzo de 2009-, cuando cayeron eso que llamé resistencias épicas.

    2008 no se repetirá. No en mucho tiempo. No es el momento histórico que requiere un cisne negro en lo que a ciclos de largo plazo se refiere. Ese tipo de episodios, recurrentes en la historia bursátil, no se ven cada dos por tres. Siempre encontrará argumentos para vaticinarlos. Pocas veces los encajará en un patrón histórico que viene funcionando desde hace más de 200 años y que tiene que ver con la regresión a la media de los precios de los activos.

    Sin embargo, tendremos sensibles correcciones, como las hubo siempre entre un gran cisne negro y el siguiente; y es más probable que se produzcan cuando el mercado se ha extremado en su optimismo y empieza a descender. Ya estamos en esa situación. También los precios han puesto sobre la mesa algo que encaja con mi idea de un mercado maduro. Esta semana me toca señalar los patrones mensuales potencialmente bajistas para los próximos meses desplegados por doquier. Son elementos que encajan con un recuento de onda que también sugiere agotamiento temporal, que se dan en zona de notable resistencia y que se ven respaldados por un brusco repunte de la volatilidad.

    Durante las semanas anteriores mi obligación ha sido aconsejarle que baje el nivel de riesgo para prepararse para una eventual corrección. Ahora le sugiero que tome el rebote que pueda venir como una nueva oportunidad para ello.