Opinión

Editorial: Las 'propuestas' francogermanas



    Si la UE se creó para protegerse de Alemania, ¿qué interpretamos de la alianza entre Merkel y Sarkozy? ¿Es legítimo que les demos las llaves? Por ahora, han dejado claro con sus propuestas que esto se hará a la francogermana.

    Respecto a la tasa sobre las transacciones financieras, ésta penalizará el crecimiento, provocará que una parte se vaya fuera y pretenda sortearlo. Restará liquidez justo cuando hace falta y no frenará la especulación. Más bien deberían mejorar el control del sector financiero. Y qué decir sobre un impuesto de sociedades único: éste puede armonizarse con un mismo tipo impositivo, pero eso no llevaría a nada si no se unifica lo que se grava, es decir, la base imponible y las deducciones que la acompañan. Tal iniciativa simplificaría las cosas para las empresas, pero eliminaría la competencia fiscal y, al final, se traduciría en una mayor carga tributaria sobre las compañías. Por no hablar de que sólo tributaría la matriz y ¿adivinan a quién favorecerá esto? A Berlín y París, con más sedes de compañías. ¿Y qué pasará con las incentivos al I+D o exportaciones? Será difícil coordinarlo. En el caso de España, nuestro tipo es alto, pero cuenta con numerosas exenciones y podríamos resultar caros si se nos priva de éstas. En cuanto al límite a la deuda, es imprescindible, pero no se debe olvidar que se obliga a los periféricos a atravesar la crisis al tiempo que recortan. Éstos tienen la obligación de ajustarse para ser sostenibles, pero aquellos con más margen fiscal como Alemania tienen la responsabilidad de brindar la estabilidad que evite el estancamiento. A su manera, Merkel y Sarkozy muestran el camino... sin haber mostrado antes el liderazgo.