Opinión

Quiosco internacional: Una salida de la crisis a la española



    POSTIMEES (ESTONIA)

    La situación de España recuerda, en su tragedia, a la fase final de la dictadura franquista y a los años siguientes de la Transición, cuando los ciudadanos del país, a fuerza de optimismo, unidad y una moral reforzada, dejaron atrás esa etapa sombría y creyeron en sus posibilidades y en un mañana mejor. Hoy ya no existe esa comunidad, y en su lugar ha aparecido un agotamiento emocional. Entre los jóvenes se registra una tasa de desempleo del 42 por ciento, y se les acusa de indiferencia, pero la mayoría de los españoles parece ser hoy presa de una especie de letargo masivo del que quieren desprenderse intelectuales, escritores, autores y científicos. Las asociaciones de ciudadanos crean redes y organizan acciones de protesta; hay abogados que demandan a las agencias de calificación y a los bancos; los empleados de la Salud protestan contra las privatizaciones. España se encuentra inmersa en una profunda crisis social, pero hay personas que buscan sus propias soluciones para un futuro mejor.