Opinión
César Vidal: ¡Reventar Madrid!
Desde la escena de 2001 en que un primate mataba a otro asestándole un golpe en la cabeza no había visto nada semejante. Los liberados sindicales -¡que viven del dinero que nos saca de los bolsillos el Gobierno!- gritaban, voceaban, aullaban consignas como "Si nos tocan los cojones, somos capaces de cualquier cosa" o "Si tenemos que entrar a matar, entraremos a matar".
Sus compañeros de piquete, conocedores de la filosofía de violación de la ley que impulsan los sindicatos y conscientes de la impunidad con que pueden actuar en España, enviaban a la clínica a cuatro empleados del Metro que habían querido trabajar.
El secretario general de CCOO -que todavía no ha dado explicaciones sobre la concesión de un ático de protección oficial a pesar de que ganaba multiplicada la cantidad máxima para ser objeto de ella- respaldando lo que acometían sus compinches.
Y, después de causar unas pérdidas diarias de más de 3 millones en la comunidad donde hay crecimiento económico; después de impedir que la gente llegue al médico; después de hacer que los ciudadanos pierdan el dinero de sus abonos y se vean en la cuerda floja de quedarse sin empleo; después de hinchar el pecho porque han logrado crear una situación dirigida frontalmente contra Aguirre, deciden suspender la huelga el sábado para no perjudicar la celebración del día del Orgullo Gay alegando que no quieren ser tachados de homófobos.
Se puede amargar la existencia del homosexual que va a trabajar decentemente por las mañanas cogiendo el metro, pero si se viste de malva, se coloca una boa rosa y se cala una peluca naranja para subirse a una carroza, ah, entonces los liberados sindicales los respaldan. ¡Gran favor de casta a casta! Tan privilegiada es la casta de los liberados que puede poner en peligro miles de empleos, saquear los presupuestos, comportarse como los matones de barrio e incluso creer que son los marineros de Krondstadt. Mientras la izquierda aplaude, el jefe de la oposición ya ha dicho que "¡Sólo fútbol!".
César Vidal, historiador y director del programa La Noche de Es.Radio.