Aprovechar los desarrolladores para aumentar la experiencia de cliente
Shivani Govil
En el actual entorno cambiante de la economía digital, las organizaciones de prácticamente todos los sectores se enfrentan a una cruda realidad: para seguir siendo competitivas y ofrecer la mejor experiencia posible al cliente, deben estar en continua evolución. La industria fintech es un gran ejemplo de esto: el crecimiento y el enfoque del sector en ofrecer una excelente experiencia del cliente han sido impulsados por actores externos a los tradicionalmente establecidos en el sector.
Las empresas necesitan innovar para crear nuevas funciones y capacidades inesperadas. Pero ¿cómo hacerlo realidad? En pocas palabras, contando con dos grupos de trabajo: los desarrolladores propios de las compañías y los expertos.
Crear un equipo de desarrolladores interno efectivo para satisfacer las necesidades del cliente es algo más que contratar personal con las habilidades informáticas adecuadas.
A menudo, las organizaciones se ven impedidas de mostrar su mejor versión debido a una cultura corporativa tradicional muy arraigada. El poder de "hacer las cosas como siempre se han hecho" puede ser difícil de descifrar, pero los buenos líderes deben ayudar al personal a aceptar el cambio.
La tecnología debe servir para mejorar el servicio que se ofrece a los usuarios
Ahí es donde entra en juego el concepto de "experimentación" y "fallo rápido". En estos entornos, los equipos de desarrolladores tienen "permiso" para probar cosas nuevas sin tener que pasar por múltiples rondas de aprobaciones de perfiles más senior.
Cuando los desarrolladores reciben permiso para poner en marcha ideas de forma ágil, los beneficios para la organización son obvios. Mejor acceso a la innovación; una mayor posibilidad de descubrir formas más efectivas de trabajar; y una cultura de apoyo y visión de futuro que ayuda a motivar al personal no técnico y a los propios desarrolladores.
Existen otros problemas clave que abordar, particularmente la aceptación de los altos ejecutivos y la atención al cliente. Primero, es esencial que los desarrolladores sepan que su trabajo es valorado por los principales líderes. Estos deben confiar en sus expertos y no sólo permitir, sino también defender el modelo de "fallo rápido" para que la empresa se beneficie de las innovaciones exitosas que surgen de él.
En segundo lugar, los desarrolladores deben trabajar en estrecha comunicación con los equipos orientados al cliente. Es importante que los equipos de desarrolladores innoven teniendo en cuenta los objetivos centrales de la empresa.
Tener una amplia red de socios desarrolladores también puede ayudar a escalar rápidamente la innovación y ofrecer soluciones que superen las expectativas del cliente con rapidez. Al construir una comunidad de grandes mentes en torno al beneficio mutuo de la innovación, las organizaciones pueden desbloquear proyectos más valiosos, con efectos positivos para ellos, sus clientes y sus socios.
El valor de las redes de desarrolladores también es evidente al observar las necesidades específicas del dominio que pueden abarcar una industria o una región en particular. Es posible que una empresa no tenga la experiencia o la capacidad como para abarcarlo todo, pero al construir comunidades efectivas de desarrolladores, una organización puede ampliar su alcance para aprovechar áreas de especialización específicas, lo que también ofrece a la compañía la oportunidad de desarrollar innovaciones de forma más rápida.
Independientemente de si la empresa utiliza desarrolladores internos o una red de socios, o ambos, el objetivo central debe ser transformar las ideas en realidades a través de prácticas de trabajo colaborativo.
Es un momento emocionante en la industria. La tecnología evoluciona más rápido cada día, solucionando más problemas y abriendo nuevas posibilidades. Para las empresas de todas las variedades, aprovechar el poder de los desarrolladores debería ser una prioridad fundamental. No se trata de buscar la innovación por sí misma, se trata de tomar medidas prácticas para garantizar el máximo impacto posible de la tecnología en la experiencia del cliente.