En un momento en el que los costes se sitúan en el centro de atención de los inversores, la comisión media de los fondos de inversión baja en el mercado español notablemente por debajo del 1 por ciento. No se trata de un fenómeno que se dé solo en los vehículos focalizados en renta fija, sino también en los que toman posiciones en bolsa. Este abaratamiento que lidera CaixaBank (0,42 por ciento de comisión) debe mucho al revulsivo que supone el desembarco de firmas especializadas en automatización y en replicar índices bursátiles. Los grandes bancos no se paralizan ante ello y responden con propuestas similares, como Popcoin o Smart Money. Es una evolución positiva, que reconoce la creciente demanda de la gestión pasiva por parte de los inversores.