Nadie dijo que iba a ser fácil, ni tampoco rápido. La equiparación de los derechos laborales entre hombres y mujeres es un largo proceso al que todavía le queda un buen trecho por recorrer. Sin embargo, en los últimos tiempos, se están realizando avances muy importantes, tanto en el terreno real, como en lo que se refiere a una mayor concienciación social. En este empeño de todos, cobran especial relevancia los gestos procedentes de personas, empresas o instituciones que se han convertido en toda una referencia para la sociedad española. Y éste es el caso de El Corte Inglés. La compañía ha decidido dar un paso al frente en su particular lucha por terminar con la discriminación que todavía tienen que soportar las mujeres en el ámbito laboral, así como tomar parte de manera activa en la erradicación de una de las más graves lacras sociales que padecemos: la violencia de género. Así, El Corte Inglés ha decidido poner en marcha un plan de paridad que, según apuntan, "se convertirá en un ejemplo para el resto de empresas del país". Asimismo, ha firmado un convenio con el Ministerio de Asuntos Sociales y varias comunidades autónomas para llevar a cabo un programa de contratación de mujeres maltratadas. La violencia de genero es, sin duda, la peor manifestación posible de la infravaloración que la mujer todavía tiene que padecer. Por eso, se deben multiplicar los esfuerzos para ponerle fin. Poco a poco, las empresas se conciencian. Como una de las compañías líderes de este país, El Corte Inglés ha sabido responder diligentemente a las denuncias realizadas por este diario sobre la situación de sus empleadas. Las empresas españolas deberían tomar nota de esta ejemplar respuesta.