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¡Cómo mola tu tupé!



    Ya no hace falta ser un "rebelde sin causa" para lucir el peinado que lleva años triunfando en las cabezas de los caballeros (de aquellos que se lo puedan permitir), el tupé. Para conseguir que el tuyo destaque más que ninguno, sigue estos consejos.

    1. Progresa adecuadamente

    ¿Cómo quieres lucir un buen tupé si tu corte de pelo no está preparado para ello? Indícale a tu peluquero de confianza que necesitas que tu cabello vaya de menos a más, de la nuca al flequillo. La máquina en una nuca rasurada al mínimo para que, progresivamente, tu pelo vaya creciendo en longitud hasta la frente, donde habrá cabello de entre 5 y 10 centímetros. Si lo dejas mucho más largo, no habrá laca que lo tenga en pie. Si es más corto, ¿dónde está el tupé?

    2. Sube el volumen

    El gran truco de un tupé de escándalo reside en el volumen de tu cabello. Ya sabemos que cada cual tiene un cuerpo y una cantidad, pero si consigues que gane volumen montar el flequillo te será mucho más sencillo. Prueba con secar tu cabello con un toalla pero echando el pelo hacia atrás y soltándolo, sin que quede apelmazado. Si usas secador, colócate con la cabeza apuntando al suelo y utiliza las yemas de los dedos para dar volumen a tu cabello.

    Por supuesto, uno de los grandes aliados del volumen es la espuma. Con tan sólo una nuez de espuma voluminizadora puedes conseguir que el pelo "crezca". Aplica el producto de la mitad a las puntas, sin apenas tocar el cuero cabelludo, y crea huecos con tus dedos para que parezca que hay mucho más.

    3. Moldeado perfecto

    El secador es nuestro amigo a la hora de moldear nuestro flequillo, ya que el calor favorece a mantener el fijado del cabello. Y es precisamente en el moldeado cuando más podemos innovar: si tienes el rostro redondeado o cuadrado, sube el tupé hacia arriba sin límite; si por el contrario tu rostro es alargado o triangular, busca el crecimiento en un lateral, pudiendo incluso marcarte la raya en el lado contrario.

    Si eres habilidoso con el cepillo, los de puntas redondas te darán un resultado más profesional y conseguirán que tu pelo se "estire" un poco más, incluso haciendo que cada mechón vaya para un sitio y tu tupé sea desaliñado pero chic.

    4. El remate

    Un tupé de 24 horas no se consigue sin ayuda externa, hace con un buen bote de laca porque lo vas a necesitar. Aplícala en la parte frontal del tupé, cubriéndote los ojos, y fijando bien la base. Prueba su fortaleza con la yema de tus dedos y consigue la forma que necesitas.

    Si tu cabello es muy lacio y ni la laca extrafuerte de tu abuela lo tiene en pie, utiliza cera, pero sin pasarte porque el pelo pesará y tu obra de arquitectura se vendrá abajo. Pondremos la cera siempre después del secador, repartiéndola bien por todo el cabello, y a poder ser con efecto mate para que no quede con sensación de engominado. Ayúdate de los dedos para prolongar tu peinado.