NBA

Tres partidos de los Lakers a vida o muerte: ¿qué tienen que hacer para pasar a play-offs?

    Kobe Bryant y Pau Gasol. Foto: Archivo.


    Tras una temporada complicada, llena de altibajos y con cambio de entrenador incluido, muy lejos de las expectativas levantadas por los fichajes del mercado estival, los Lakers se juegan con los Utah Jazz en los tres últimos partidos de la 'regular season' el pase a los play-offs. Los angelinos, con una victoria más que sus contrincantes, deberán mantener la diferencia con los Jazz para conseguir su objetivo. Clasificarse sería, en cierta medida, minimizar los daños; quedarse fuera, la confirmación de un estrepitoso fracaso.

    A falta de tres partidos, los Lakers se encuentran octavos en la Conferencia Oeste, con un balance de 42 victorias y 37 derrotas. Con 41 victorias y 38 derrotas, la franquicia de Utah pone en peligro el pase de los angelinos a los play-offs. La carrera por la clasificación promete ser apasionante.

    Y es que el calendario de ambos conjuntos hace indicar que el desenlace final se decidirá por mínimos detalles. El equipo de Kobe, Pau y compañía se enfrentará a Golden State esta madrugada, a San Antonio en la del lunes y a Houston Rockets la noche del jueves (todos en el Staples Center); mientras que Utah jugará en dos ocasiones contra los Minnesota Timberwolves de Ricky Rubio (primero en casa, en la madrugada del sábado y después en Minnesota, en la madrugada del martes) y en Memphis, donde les esperarán los Grizzlies de Marc Gasol en la noche del jueves.

    Necesitan una victoria más

    Sin embargo, a pesar de que los chicos de Mike D´Antoni tienen una victoria más Utah, el empate entre ambos no valdría a los angelinos. Los criterios de clasificación de la NBA entre dos equipos empatados establecen que, en caso de empate, el equipo que sea líder de división queda por delante. Al no cumplir ninguno de los dos ese criterio, se pasaría al siguiente, que clasifica al equipo con mejor balance en enfrentamientos directos, aspecto en el que Jazz y Lakers estarían empatadas. El siguiente criterio, los enfrentamientos en conferencia, daría la victoria a los Jazz, que tienen un balance de 7-7, por el 7-8 de los Lakers.

    Por lo tanto, los Lakers están obligados a conseguir las mismas o más victorias que su rival, pero con un calendario ostensiblemente más difícil. Mientras que los Lakers jugarán contra tres grandes equipos de la Conferencia Este (Golden State, una de las revelaciones del campeonato; San Antonio, que disputa a Oklahoma el liderato de conferencia, y Houston, que aún debe certificar su clasificación), Utah juega dos partidos contra Minnesota, eliminado matemáticamente de playoffs, y únicamente los Grizzlies serán los rivales que se jueguen algo cuando se enfrenten, ya que aún pueden conseguir la tercera plaza de la Conferencia Este, que en teoría le otorgaría un rival más asequible en el primer cruce de play-offs.

    Todo está por decidir, y los angelinos deberán tirar de épica para seguir adelante en la NBA. El excelso estado de forma de Kobe, que se está echando el equipo a las espaldas en el último tramo de la competición, y la notoria mejora en las aportaciones de Pau Gasol tras su fascitis plantar serán las principales bazas de la franquicia de Los Ángeles, que sin su mejor organizador de juego, Steve Nash, tendrá que poner toda la carne en el asador para estar en la fase final de la mejor competición baloncestística del mundo.