Motor

Esta pequeña pieza de tu coche aumenta el consumo de combustible hasta en un 30%: pocos conductores la revisan

Mecánico arreglando coche | Alamy

Daniel Ceped

Durante el mantenimiento de un coche, lo más habitual es revisar la presión de los neumáticos, el nivel de aceite y el estado del líquido refrigerante o de frenos. Sin embargo, en un vehículo hay muchas otras piezas que afectan a su rendimiento y que los conductores suelen pasar por alto.

El mejor ejemplo son las bujías, unas pequeñas piezas del motor que generan la chispa que enciende la mezcla de combustible y aire para que se inicie todo el ciclo de funcionamiento del vehículo. Normalmente, los conductores que no son expertos mecánicos las ignoran, pero si las bujías no están en buen estado, el consumo de combustible aumenta.

Hasta un 30% más de consumo

Tal y como explica el medio lituano Vakaru Ekspresas, si las bujías están desgastadas el motor no funciona correctamente y el consumo de combustible puede aumentar hasta en un 30%. Por lo tanto, si no se cambian con cierta frecuencia, estaremos perdiendo dinero por cada kilómetro recorrido.

Bujías del motor | iStock

Y no solo es una cuestión económica, pues unas bujías en buen estado también se notan a la hora de conducir. La clave es que hacen que el motor funcione más suave, la tracción sea mejor y el vehículo ofrezca una respuesta más rápida. Además, contamina menos.

¿Cada cuánto hay que cambiarlas?

Los expertos recomiendan sustituir las bujías cuando se hayan recorrido entre 80.000 y 100.000 kilómetros, aunque hay algunas piezas hechas de platino o iridio duran más y aguantan hasta los 160.000 kilómetros.

Más allá de la distancia, hay señales que indican que las bujías están desgastadas, como la dificultad para arrancar cuando hace frío, la pérdida de potencia o el aumento de consumo. Aún así, hay que tener en cuenta que algunos coches llevan incorporada una luz de avería que se enciende cuando las bujías están totalmente desgastadas.