Motor

Este Honda no es un Renault 5 GT Turbo de los 80, pero tiene más "chicha"

  • El concepto de llama Sustaina-C y se había visto en Japón en color rojo por su carrocería hecha con pilotos de freno reciclados
  • Se presenta en la Semana de la Moda de Milán como solución de Honda para recursos finitos en el automóvil

Miguel García

Coche y moda se dan la mano, pero van más allá de la estética y los gustos, como pretende demostrar Honda a partir de hoy con el estudio conceptual Sustaina-C, que ha llevado a la Semana de la Moda de Milán que arranca hoy.

Sí, el frontal del Sustaina-C es perfectamente Honda, como el Honda e, que a su vez venía de los primeros Honda Civic. Pero si obvias la parte delantera o te fijas desde otras perspectivas, tendrías la tentación de pasar de largo, creyendo que es una iteración más del inminente Renault 5 eléctrico. Y estarías cometiendo un error, porque este concepto de Honda pretende sensibilizar sobre el diseño sostenible para un futuro de Movilidad Urbana. Y claro que es eléctrico.

Sí, podría recordar a un R5 GT Turbo, pero el Honda Sustaina-C trata de materiales y sostenibilidad

Hoy, el concepto Sustaina-C de Honda se presenta en color blanco, pero lo conocimos en color rojo cuando se desveló en octubre de 2023. Los paneles de la carrocería exteriores están hechos con resinas acrílicas recicladas de las tulipas de los pilotos traseros. No necesitan pintura, que es uno de los procesos que más emisiones generan durante la fabricación de un coche.

Los paneles de carrocería plásticos del Honda Sustain-C no necesitan ser pintados

Según Honda podrían reducir las emisiones en un 45%. En el proceso de desarrollo se ha implicado Mitsubishi Chemical, para conseguir que las tulipas de segunda mano a final de su vida útil se puedan triturar y volver a moldear para crear paneles de carrocería. Piensa incluso en paneles de carrocería semitransparentes, que ya utilizan en el scooter Honda SH125i Vetro.

Reciclar con valor añadido

El portavoz del prototipo considera que "los nuevos materiales pueden crear una estética única y proporcionar también a los clientes un valor añadido". La primera parte del valor añadido se refiere a que los paneles resisten al agrietamiento porque originalmente ya tenían unas características que permitían una degradación mínima ante la radiación solar ultravioleta. Por el contrario, y ahí está la contribución de Mitsubishi, a diferencia de las tulipas de origen, los paneles tienen buenas características mecánicas. Gracias a tratamientos de reciclaje avanzados, los paneles de resina acrílica pueden soportar pequeñas colisiones de manera elástica y recuperar su forma, lo que no sucede con en plástico de los pilotos convencionales.

La limpieza de líneas contrasta con esas trazas amarmoladas en la carrocería blanca: querían demostrar la versatilidad cromática, incluso fluorescente, de las resinas recicladas

El segundo valor añadido se encuentra en la parte trasera. Utilizando las mismas resinas acrílicas, pero transparentes, se ha conformado un portón trasero, capaz de proteger la pantalla de LED que está detrás. A través del portón, el Sustaina-C podría comunicarse mediante mensajes o imágenes con los usuarios que van detrás.

Las pantallas led tras el portón de plástico reciclado abren la vía a funcionalidades inéditas

Solo es cuestión de imaginación poder utilizar este potencial para hacer diseños variables o comunicaciones eficaces para una circulación más segura. Y todo ello, recurriendo a un enfoque de circularidad de recursos. Sí, el color oscuro de su trasera podría retrotraernos al estilo de los Volvo C30 o al más moderno Volkswagen ID.3, pero ¿algún otro coche ha sido capaz de decir, a la vez, hola y adiós a Milano?

Adiós, Milano