Motor

Citroën 2 CV Sáhara, a subasta un todoterreno diferente de los años sesenta

  • A partir del Citroën 2 CV normal, contaba con un segundo motor en el maletero que movía las ruedas traseras.
  • Las presiones de los concesionarios franceses hicieron que la marca desarrollara un prototipo con tracción 4x4 en 1958.
  • Esta unidad del 2 CV Sáhara que sale a subasta ha sido reconstruida entre 2021 y 2023
Esta es la unidad que saldrá a subasta, que ha sido ampliamente reconstruida entre 2021 y 2023.

Carlos Cancela

En las subastas de coches clásicos y de colección, lo normal es encontrar muchos Ferrari, algunos Porsche o Maserati y versiones especiales de los Aston Martin de los años sesenta. Coches con mucha historia o vehículos de carreras, todos ellos de precios muy caros. Y es que el coleccionismo de coches clásicos vive un gran momento.

Además de estos coches muy exclusivos, o los Rolls Royce de los años treinta que parecen recién salidos de fábrica, a veces se encuentran coches con encanto y un precio algo más accesible. Y eso es lo que les vamos a contar en este ocasión en relación con una subasta de RM Sotheby´s que se celebrará los próximos 10 11 de mayo en la localidad de Mónaco.

El interior característico del Citroën 2CV con sus asientos de lona sobre una estructura tubular.

El coche que les traemos hoy es un vehículo muy especial y exclusivo, puesto que solo se construyeron menos de 700 unidades, de las que la gran mayoría han desaparecido. Pero las pocas que quedan son muy buscadas por los expertos. Les hablo del Citroën 2 CV 4x4 Sáhara. Es una versión exclusiva de este legendario modelo de origen francés, del que se llegaron a fabricar cerca de cinco millones de unidades entre 1940 y 1988. Sin embargo, de esta versión se hicieron muy pocas unidades, menos de 700.

Solo 700 unidades

Esta denominación de Sáhara no se refería solo a un acabado especial, una terminación más lujosa o algo más campera del tradicional modelo de origen francés. En realidad era un vehículo experimental que llegó finalmente a la producción, aunque de forma muy limitada. La clave de este modelo era su tracción 4x4, conseguida en base a dos motores. Ese tipo de tracción en las cuatro ruedas y su peso muy reducido le hacían un coche casi imparable, porque además era más alto de lo normal y con suspensiones de recorridos largos. Con ello, se convertía en un todoterreno de verdad, pero muy ligero.

Ahora, con el coche eléctrico, hablamos muchas veces de tracción 4x4. Y lo hacemos en base a dos motores, que actúan uno sobre cada eje. Eso es posible gracias a una unidad de gestión electrónica que ajusta el par que debe entregar cada uno de los motores para conseguir un perfecto comportamiento dinámico.

Esto es lo más reconocible de la versión Sáhara su portón trasero diferente con el ventilador.

Pero en los años sesenta, cuando se produjeron las 700 unidades del Citroën 2 CV Sáhara, la tecnología era mucho más sencilla. Este modelo, básicamente, era un 2 CV normal, con su motor normal en posición delantera, que movía las ruedas delanteras. A este coche se le añadía un segundo motor trasero, situado en el maletero del coche, que accionaba las ruedas traseras. Lo peor era que al no haber esa gestión electrónica a la que ahora estamos tan acostumbrados, su conductor debía gestionar por separado cada uno de los motores, lo que debía ser muy extraño.

El primer prototipo en 1958

El origen de esta versión también tiene su historia. Movida por la presión de los concesionarios de Citroën, que se cree que convirtieron algunos de sus propios coches de esta manera, la marca presentó su prototipo en 1958 y comenzó la producción dos años después. La versión oficial del modelo estaba destinada al servicio en colonias francesas remotas, como las del norte de África. Allí, su tracción 4x4 y su ligereza le hacían un vehículo muy interesante.

Yo no he conducido nunca uno de estos vehículos, me hubiera gustado, pero si los vi en los años setenta circulando por las carreteras españolas. Y es que la Guardia Civil de Tráfico adquirió varias unidades de este vehículo que circulaban por la carreteras en busca de infractores. Eran coches que rodaban siempre muy deprisa.

El conductor debía gestionar de manera independiente cada uno de los dos motores.

Su precio estimado en esta subasta es de 100.000 euros, una cantidad sin duda elevada, pero que responde a la lógica. Es un coche del que solo deben quedar menos de 100 unidades y es un vehículo realmente histórico. Además, la unidad que se ofrecerá en esta subasta tiene solo 42.000 kilómetros y ha sido completamente reconstruida y puesta al día entre 2021 y 2023

Cinco millones de unidades del 2 CV

El Citroën 2 CV fue un coche clave en la historia del automóvil francés, del que se llegaron a fabricar cinco millones de unidades y que, entre otras cosas, se produjo en la fábrica española de Vigo. La simplicidad del diseño fundamental del Citroën 2CV fue una de sus claves. Fue concebido por la marca francesa en 1948 como un medio para movilizar de forma asequible a un segmento de la sociedad rural que todavía dependía del caballo y el carro para sus desplazamientos.

El 2CV fue construido para ser barato, muy fiable, fácil de mantener y con una suspensión de largo recorrido que le permitía atravesar un campo recién arado. Seguro que muchos de ustedes recuerdan esa famosa publicidad de la época, con una cesta de huevos en equilibrio sobre el asiento del pasajero mientras circulaba.

Otro aspecto diferenciador era su rueda sobre el capó delantero, al no poder ir en el maletero posterior.

Salvo el aumento ocasional de potencia y capacidad del motor, el 2CV se mantuvo fiel a su versión original a lo largo de sus 40 años de producción, con la notable excepción de esta variante 4x4 'Sahara'.

Unidad reconstruida en 2023

Por lo que se refiere a la unidad que se subastará en Mónaco, ha tenido una vida fascinante. Fabricado en noviembre de 1965, este Citroën se matriculó a nombre de su primer propietario ese mismo mes, como lo demuestra la documentación de época. Un médico que se trasladó desde Marsella a Villefranche-de-Panat, una comuna rural del departamento de Aveyron, en el sur de Francia, decidió adquirirlo por la versatilidad todoterreno del 2CV 4x4 'Sahara' para su recorrido puerta a puerta.

El Dr. Raynal utilizó el Citroën en todas las condiciones meteorológicas hasta los años 80, cuando el 2CV fue sustituido por un Range Rover. Desde entonces hasta que el 'Sáhara' fue adquirido por el propietario actual en febrero de 2020, el coche solo cambió de propietario una vez en 2010 y rara vez se utilizó.

Cuando su actual propietario lo adquirió, el coche estaba presentable pero desgastado, por lo que se inició un proceso de restauración. Fue un trabajo meticuloso que está perfectamente documentado con facturas y fotos que se adjuntan al coche que se subasta. esta restauración fue tanto estética como mecánica. Se retiró la carrocería hasta el chasis, que fue renovado y repintado, y también se renovó el acabado de la carrocería.

Tanto los motores como las cajas de cambios se han desmontado y puesto a punto, el embrague y los frenos son nuevos y la suspensión y el tren de rodaje se han sustituido por las piezas correctas. El cuentakilómetros de esta unidad del 2CV Sáhara marca 40.492 kilómetros. Este automóvil conserva su carrocería, chasis y motores delanteros y traseros con los mismos números, lo que le convierte en un clásico raro y utilizable con una encantadora historia francesa.