Motor
Cómo vender o comprar un coche a un particular con garantías y al mejor precio
- Pasar una ITV antes de vender el coche, aunque no toque pasarla, es una garantía adicional para el comprador.
- Hacer una limpieza a fondo del vehículo, tanto del exterior como del interior, facilitará la operación de compra-venta.
Charo Sardina
Cada día son más frecuentes las transacciones de coches de segunda mano, tanto con empresas como entre particulares. Se pueden conseguir buenos precios, tanto de compra o de venta, pero son operaciones sujetas a riesgos, que te contamos aquí.
Las ventas de coches usados se disparan frente a las de nuevos. Por un lado la complicada situación económica, pero también los retrasos en las entregas de coches nuevos y las dudas que plantea la llegada del coche eléctrico han hecho que casi el 80% de los posibles compradores se planteen comprar un usado. Por ello, es importante tener en cuenta estas consejos.
Si quiere vender su coche de segunda mano no basta con que piense que su automóvil está en muy buen estado, también hay que demostrarlo. Normalmente, los vehículos usados se tasan con respecto a su valor venal, que es un precio oficial según las características del modelo, su equipamiento y, sobre todo, el año de matriculación. Este valor venal es de dominio público y puedes encontrarlo en el BOE en una lista ordenada por marcas y modelos.
Sin embargo, en este valor venal no se incluyen el número de kilómetros recorridos o el mantenimiento que haya tenido el vehículo. Por ello, si tu coche está en buenas condiciones y tiene pocos kilómetros se puede conseguir un mejor precio que el que aparece en esa lista. Para ello, aquí te damos algunas claves:
Impecable aspecto
Para empezar, es muy importante que el coche esté impecable tanto por dentro como por fuera. Una carrocería brillante y un interior impecable darán muy buena imagen. Y por ello, una norma básica de aplicación inmediata al empezar la gestión de venta es lavar el coche perfectamente, por dentro y por fuera.
Una carrocería sin golpes ni rayajos, las carcasas de los faros libres de daños, los logos de la marca y embellecedores en su sitio… son puntos positivos para que el comprador no recele del estado del vehículo. Si tiene adhesivos en la carrocería o cristales tintados con adhesivos, es aconsejable quitárselos con todo el cuidado para que no se note. Ya se encargará el comprador de personalizar el coche, si quiere.
Otro valor en alza serán las ventanillas y parabrisas en perfecto estado. Si presentan algún chinazo, mejor solucionarlo antes de enseñárselo al vendedor. Y no olvides echar un vistazo al estado de los limpiaparabrisas. Es una operación de bajo coste y se da buena imagen.
Los grupos ópticos deben funcionar perfectamente. Comprueba antes de vender el coche que las luces de día, las cortas, las largas, las de freno, los intermitentes, las antiniebla si va equipado con ellas, funcionan. Un faro fundido bajará el precio del vehículo. Del mismo modo, que las carcasas con grietas o roturas. Comprueba que las puertas y ventanillas abran y cierren bien. Si no lo hacen puede ser signo de que el coche ha tenido un golpe importante.
Neumáticos
En cuanto a los neumáticos, unas gomas en mal estado denotarán que las suspensiones también lo están e, incluso, el motor. Parecerá que no se ha cuidado bien el vehículo. La profundidad mínima del dibujo permitida es de 1.6 mm. Ten por seguro, que el comprador lo comprobará. Y no te olvides de las llantas, a más nuevas, mejor.
Por supuesto, ofrécele las llaves, el 'gato' y todas las herramientas que incluya el vehículo, además de la rueda de repuesto o el kit antipinchazos si lo lleva.
En el interior, unas alfombrillas desgastadas pero limpias son señal de que la moqueta del piso estará bien. En cuanto a los asientos, cepíllalos o límpialos con un producto específico, como también el salpicadero y el maletero. Un detalle que llamará la atención del comprador es el volante y la palanca de cambios. Procura que tengan el mejor aspecto posible.
Si en el habitáculo huele a tabaco, será más difícil de vender el coche, sobre todo si es un no fumador, pero en cualquier caso, ventila bien el interior y perfúmalo. Una limpieza a fondo de tu coche a manos de profesionales puede costarte entre 30 y 60 euros, pero quizá merezca la pena por la buena impresión que dejará en el posible comprador.
Una ITV extra
Como aseguran desde AECA-ITV, un punto a tu favor a la hora de vender el coche será mostrarle al comprador el resultado positivo de una ITV reciente. Es posible que no le toque cuando vayas a deshacerte de él, pero opcionalmente puedes acercarte por una estación y pasarla voluntariamente. Esto demostrará que, mecánicamente, todo está correcto y será un plus interesante para conseguir un mejor precio. En la ITV se revisará el motor, la dirección, el alumbrado, los frenos, las emisiones… Además, esta inspección voluntaria suele tener menor coste que la obligatoria.
En cuanto a la documentación, si le ofreces la ficha técnica del vehículo, el libro de mantenimiento al día, los comprobantes del seguro, el recibo de haber pagado el impuesto del ayuntamiento (IVTM) y el permiso de circulación, evitarás que el comprador se vea obligado a pedir duplicados y con ello tenga una excusa para rebajar el precio del coche. Además, si tienes el libro de instrucciones, mejor que mejor.
Del mismo modo, si le has añadido algún extra a tu coche, muéstrale al comprador los certificados de homologación, para que no tenga problemas cuando pase las siguientes ITV. Y no te olvides ofrecerle los dos juegos de llaves con el mando a distancia que funcione correctamente. El duplicado de una llave puede costar entre 100 y 200 euros.
Si eres el comprador
Si, por el contrario, eres tú el comprador de un vehículo usado a un particular, el primer consejo a seguir es huir de las gangas. Comprobar la identidad del vendedor es vital para evitar lo que se denomina 'phishing car', una estafa que se suele encontrar en internet en la que un perfil falso vende todo tipo de vehículos.
Una vez comprobado que el vendedor es serio, infórmate qué trato ha tenido el vehículo, cuántos kilómetros tiene y si ha tenido algún golpe estructural. En la DGT puedes pedir el historial del vehículo para informarte si ha tenido un accidente importante. Hay que pagar unas tasas pero merece la pena. En esta historia del vehículo también están detallados muchos datos de interés como: todos sus propietarios, incluido el último, la fecha de la primera matriculación, si tiene pagados todos los impuestos, si se ha dado de baja… Y en el Registro de Bienes e Inmuebles puedes comprobar si tiene algún embargo. Todas las deudas o multas pendientes se transferirán al comprador.
Prueba el coche
Para saber su estado, pide al vendedor que te lo deje probar y recuerda que debe darte una garantía de, al menos, seis meses. Este es el tiempo que tienes para reclamar si has encontrado algún 'vicio oculto'.
Debes exigir que el coche tenga todas las ITV pasadas satisfactoriamente y, además, puedes exigirle que lleve al coche a un taller de tu confianza para una revisión mecánica. Si el coche ha tenido un golpe importante podría ser que, además, no disponga de airbags porque no se hayan reemplazado los originales, que los cinturones presenten holguras o los reposacabezas no estén firmes.
Una clave para saber si el coche ha tenido un golpe es que haya gran diferencia entre el estado interior y exterior. El coche puede haber sido repintado entero y mostrar una carrocería reluciente y, sin embargo, ofrecer un interior desgastado.
Problemas de corrosión
Echa un vistazo a los pasos de rueda. Podría presentar óxidos, esto es habitual en los coches que se han movido cerca de zonas muy húmedas. Si es así, podría tener problemas de corrosión.
Si pruebas el coche antes de comprarlo puedes comprobar no solo cómo va el vehículo sino también cómo funcionan los sistemas de ayudas a la conducción, si los tiene, como el control de velocidad, el de ángulo muerto… y no se te olvide comprobar el climatizador o aire acondicionado. En esta toma de contacto puedes ver también si se enciende algún testigo que indique algún problema. No te olvides de exigirle todos los papeles en regla y si no los tiene pedirle duplicados.
Y por último, y antes de formalizar la compra, exige un contrato de compraventa, con los datos personales de comprador y vendedor, el importe de la venta, la fecha y la hora de la transferencia, la marca y modelo del vehículo y todos sus características técnicas. Asimismo, el número de matrícula y bastidor. En el contrato de compra-venta deben especificarse además los seis meses que tiene el comprador para reclamar posibles averías.