Citroën Oli, el prototipo que no se producirá, pero anticipa los futuros modelos de la marca
- Tiene una autonomía de 400 kilómetros
- Utiliza materiales reciclados y sostenibles
Almudena Cobas
Citroën presentó ayer en sociedad el prototipo Oli, un vehículo 100% eléctrico con un diseño rompedor y sostenible que será "padre" de los modelos familiares de la firma francesa que están por llegar.
El director general de Citroën, Vincent Cobée, apuntó en un evento celebrado en Madrid que el prototipo no se llegará a producir como tal, pero deja entrever la visión que tiene la compañía de cómo serán sus futuros familiares de 'cero emisiones' en términos de identidad de marca, materiales sostenibles y peso.
El máximo responsable de Citroën definió tres desafíos a los que se enfrenta la industria automovilística: los coches están aparcados el 95% del tiempo; el 90% del tiempo sólo los ocupa una persona y los vehículos pesan ahora unos 500 kilos más que en los años setenta.
Con Oli, la compañía del doble chevrón responde a todo ello, ofreciendo una solución práctica y sostenible. El prototipo, que toma como base las principales ideas del cuadriciclo eléctrico Ami, cuenta con componentes de peso reducido reciclados y reciclables. También está equipado con piezas idénticas, como los paragolpes, que se pueden intercambiar con el fin de hacerlo más asequible.
Ante la problemática que puede suponer todo esto en la cadena de producción, Cobée señaló que por el momento no se industrializará, pero entiende que en el futuro la cadena tendrá que actualizarse. "No podemos usar recursos y luego deshacernos de ellos. Es una parte en la que queremos estar involucrados", recalcó.
Este "radical" prototipo tiene un peso de 1.000 kilogramos y alcanza una velocidad máxima de 110 kilómetros/hora. Además, ofrece una autonomía de 400 kilómetros con un consumo de 10 kWh. En cuanto a la velocidad de carga, Oli pasa del 20% al 80% en menos de media hora (23 minutos).
Práctico interior
El interior del Oli cuenta con asientos de malla que imitan por diseño y ergonomía a las sillas de oficina, mientras que el suelo es de tejido lavable. El salpicadero que cuelga tras el parabrisas, incluye un soporte para smartphones y hasta cinco interruptores para el sistema de climatización.
Detrás y debajo del travesaño se encuentra el "sofá" fabricado con BASF Elastollan, una plataforma de almacenamiento en poliuretano termoplástico (TPU) impreso en 3D y reciclable de color naranja brillante.
Asimismo, las dos salidas de aire directas permiten utilizar una unidad de aire acondicionado más pequeña con el objetivo de contribuir a aumentar la eficiencia y a reducir el peso.
Usuarios y no propietarios
Citroën tiene entre sus objetivos ofrecer "libertad en el transporte". Por ello, Cobée defendió el uso compartido de los vehículos dotándolos de "varias vidas" con el fin último de ahorrar costes, ya que "fabricar un coche, es más rentable que fabricar dos".
Sin embargo, apuntó que Madrid es "la única ciudad en el mundo" en la que el carsharing es rentable. Esta forma de movilidad se ha convertido en un negocio atractivo para muchas compañías teniendo en cuenta las restricciones que cada vez más ciudades están implantando y es que, en menos de dos meses, llegarán a casi 150 municipios las Zonas de Bajas Emisiones (ZBE).
Con Oli, Citroën da a conocer lo que podremos esperar de la marca en los años venideros. Vehículos familiares, sostenibles, reciclables y eléctricos, pero, también asequibles con precios que podrían ascender hasta los 30.000 euros.