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Goldman: La política comercial de EEUU no es "suicida"


    José Luis de Haro

    El consejero delegado de Goldman Sachs, Lloyd Blankfein, normalmente crítico con las políticas de la Casa Blanca, dijo ayer durante una entrevista en el Club Económico de Nueva York que la escalada arancelaria iniciada por la Administración del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, tiene sentido desde el punto de vista estratégico.

    "Eso es lo que haríamos si esa fuera una posición para negociar y quisiéramos recordar a la parte contraria cuánto poder de contraataque tenemos", señaló el directivo de uno de los bancos más importantes a este lado del Atlántico.

    Aún así, en su conversación con el director de Bloomberg, John Micklethwait, Blankfein consideró que el gobierno estadounidense no ha comenzado una misión "suicida"con su política comercial.

    Según el capitán de Goldman Sachs, quien se ha rumoreado que podría pasar el testigo en la entidad bancaria a finales de este año, la intención de la Administración Trump "no es causar un colapso económico", incidió. "Como muchos han comentado se trata de un patrón de negociación", añadió.

    Estos comentarios se produjeron un día después de que Trump anunciase nuevos aranceles del 10 por ciento sobre productos chinos por valor de 200.000 millones de dólares, dejando la puerta abierta a tasar bienes adicionales por otros 200.000 millones más si China sigue respondiendo con la misma moneda a las presiones de Washington.

    El Gobierno de EEUU también ha impuesto aranceles a sus aliados, entre los que se encuentran Canadá y la Unión Europea. Ambos han reaccionado a los gravámenes del 25 por ciento y el 10 por ciento, respectivamente, sobre el acero y el aluminio imponiendo aranceles sobre productos estadounidenses por valor de 11.030 millones de euros, en el caso canadiense, y de 2.800 millones de euros, en el caso europeo.

    Por su parte, el premio Nobel de Economía, Paul Krugman, señaló a primera hora del martes que estaba "sorprendido" por la "complacencia del mercado" ante la marcha emprendida por la Casa Blanca hacia una guerra comercial en toda regla.