Bolsa, mercados y cotizaciones
San José, Ercros, Dogi... Las verdaderas estrellas de 2016 son los 'chicharros'
- Capitalizan menos de 300 millones y suben más de un 100%
- En estas inversiones hay que asumir un gran riesgo
Isabel M. Gaspar
Ser un 'chicharro' implica varias cosas. Por un lado, que tu valor en mercado es reducido, que tienes poca liquidez y que la volatilidad es tu principal acompañante. Un cóctel que hace que aquel inversor que esté interesado en estas firmas asuma un gran riesgo. Una estrategia que este año ha dado sus frutos para los que hayan puesto sus ojos en Grupo Empresarial San José, Ercros, Dogi, Tecnocom y Sniace, que han subido más de un 170% desde enero. Ninguna de ellas supera los 300 millones de capitalización.
En algunos casos la vertiginosa revalorización en bolsa se debe a movimientos especulativos, ya que una sola operación puede influir notablemente en la evolución bursátil de la compañía. De hecho, no es extraño ver revalorizaciones diarias de un 10% y caídas similares en la jornada posterior. En otros casos, el generoso balance anual se debe a una mejora en las cuentas, ya que, tradicionalmente, en momentos complicados de ciclo económico este tipo de compañía suele arrastrar estados financieros problemáticos.
En el caso de Grupo Empresarial San José, la más alcista del mercado español con una subida superior al 270% en el año, parece que se vislumbran mejoras. Tras siete años consecutivos de pérdidas, la firma logró un beneficio de 8,6 millones el pasado año. Es normal que para este tipo de compañías el seguimiento de los bancos de inversión sea escaso o nulo, por lo que no existen perspectivas sobre cuál será su evolución.
Por su parte, Ercros también escala más de un 270% desde enero. El grupo, cuyo negocio se divide en tres divisiones, derivados del cloro, química y farmacia, parece que está cambiando de rumbo. Según informó este lunes, en los nueve primeros meses del año ha conseguido un beneficio de 27,28 millones de euros, lo que supone multiplicar por 4,6 veces lo alcanzado en el mismo período de 2015. Un resultado que, según la propia empresa, es gracias a la reestructuración llevada a cabo en los últimos años y a la favorable coyuntura económica. Si finalmente consigue beneficios en 2016, sería el segundo año consecutivo, ya que desde 2007 a 2014 ha registrado pérdidas.
El tercer puesto entre las compañías más alcistas lo ocupa Dogi, que ha escalado más de un 250%. A pesar de este repunte, el grupo está todavía muy lejos de recuperar sus mejores cotas en bolsa, ya que su máximo histórico se sitúa en los 31,8 euros marcados en 2001 frente a los 2,8 euros en los que cotiza actualmente. La firma regresó al parqué en 2014 tras estar suspendida durante cinco años
Grandes plusvalías y grandes pérdidas
Si bien estos valores han dejado suculentas ganancias a los inversores que hayan sabido aprovecharlo, hay que ser cautelosos. Fundamentalmente porque al igual que pueden generar grandes plusvalías, también pueden cosechar importantes pérdidas. Un motivo que provoca que muchos expertos recomienden apostar por este tipo de compañías en cortos periodos de tiempo. Además, hay que tener en cuenta que al contar con poca liquidez, es probable que el inversor no pueda realizar operaciones con estas acciones cuando quiera.
Del mismo modo, aunque estén catalogados de 'chicharros' también es conveniente realizar un análisis para ver cuál de estas empresas se encuentra en un mejor momento y puede aportar algo más de fiabilidad, ya que no se trata de invertir sin estrategia por el simple hecho de ser 'chicharros'. Asimismo, no es frecuente que estas firmas paguen dividendo, por lo que la única opción que tiene el inversor para sacar partido es a través de la revalorización de los títulos.