Bolsa, mercados y cotizaciones
China culpa a tiburones de Wall Street como Soros de su debacle en la bolsa
José Luis de Haro
Pese a los intentos del gobierno de Pekín de intentar frenar la sangría que sufre la renta variable china, las bolsas del país han borrado ya cerca de 3,5 billones de dólares de su valor de mercado. Un hecho que los expertos relacionan con el importante apalancamiento y la euforia bursátil que ha caracterizado a la segunda economía del mundo durante los últimos meses.
Sin embargo, como señala el portal Zero Hedge, los medios de comunicación chinos intentan buscar culpables en Occidente. Según el periódico Ming Pao, el multimillonario inversor George Soros ha especulado con la debacle china y podría haber sido uno de los responsables de la presión bajista que pesa sobre las bolsas del país. El portal de noticias ifeng.com, citan a un analista que compara la situación actual con 1997, cuando el Hang Seng se desplomó un 60% tras tocar un máximo de 16.673 puntos.
"La fuerte caída estuvo provocada por Soros, que operó en corto con el dólar de Hong Kong y con los futuros del Hang Seng", explicaba este analista que señaló las similitudes entre este hecho y las prácticas experimentadas durante las dos últimas sesiones bursátiles en China.
Esta teoría, donde inversores y otros fondos podrían haberse posicionado a corto en el mercado de futuros y ocasionado posteriormente las masivas pérdidas, estaría apoyada por las declaraciones de distintos gurús bursátiles, según algunos medios chinos. De hecho, Bill Groos, de Janus Capital y co-fundador de Pimco, señaló a comienzos de junio que el Shenzhen Stock Exchange Component Index "presentaba una oportunidad perfecta para operar en corto".
Por aquel entonces, el índice tocaba máximos de los últimos siete años pero cayó más de un 30% tras las declaraciones de Gross. Tanto Morgan Stanley como Credit Suisse también han sido bastante bajistas con la renta variable china durante algún tiempo, lo que ha inspirado a los medios chinos a considerar estos hechos como ataques contra su renta variable.