Bolsa, mercados y cotizaciones

Los bancos centrales 'se refugian' en el oro

  • Compraron 477 toneladas de oro en 2014, un 17% más que en 2013


Mientras los precios del oro caían en los mercados financieros, los bancos centrales llenaron sus reservas con el metal dorado. Compraron 477 toneladas netas de oro durante el año 2014, un 17% más que en 2013 y el segundo dato más alto de los últimos 50 años.

Este volumen significa que las entidades emplearon en torno a 19.000 millones de dólares para comprar lingotes del metal. También aumentó la demanda de oro para la creación de nuevos mercados de cambio, como el Mercado Internacional de Oro de Shanghái.

Pese a estos dos avances, la demanda global de esta materia se contrajo un 4% a lo largo de 2014, según los datos publicados por el Consejo Mundial del Oro. Este descenso estuvo motivado por el frenazo en las adquisiciones del metal precioso por parte de las joyerías, que compraron un 10% menos que en 2013. La demanda del metal dorado por parte del sector del lujo siempre es la más elevada, por lo que marca la tendencia cada año.

Volatilidad y diversificación

Los grandes bancos centrales apenas variaron sus reservas de oro en 2014 y los principales movimientos correspondieron a países asiáticos emergentes o vinculados con el petróleo.

El objetivo de estas instituciones es diversificar el contenido de sus arcas, que estaban llenas de dólares, y así construir una cartera de activos más sólida. "La demanda de los países emergentes seguirá fuerte", advirtió Alistair Hewitt, jefe de análisis de mercados del Consejo Mundial del Oro, en declaraciones a Bloomberg.

No es extraño que los bancos centrales quieran proteger sus reservas frente a la actuación de otras instituciones monetarias. La guerra de divisas ha generado una gran volatilidad en el mercado de divisas y el precio relativo es susceptible de sufrir repentinos descensos. Nada impide que la Reserva Federal sea el siguiente en inyectar estímulos monetarios si se cansa de la apreciación del dólar, lo que hace que ninguna divisa sea inmune a un mercado tan intervenido.

Además, si se tiene en cuenta la fuerte apreciación del dólar de los últimos años y la depreciación del oro, parece ser buen momento para cambiar un activo por otro. Comprar uno apreciado y vender otro depreciado, una estrategia que puede ser interesante. Algunos bancos centrales no se lo han pensado y están aprovechando la coyuntura para cambiar el color de sus cámaras de reservas, del verde al dorado.

Entre los bancos que han refugiado sus reservas en el oro destacan algunos países muy vinculados a la exportación de petróleo. Son los casos de Rusia, Iraq, Kazajistán o Azerbaiyán. La caída del precio del barril ha provocado que algunos países hayan optado por cubrir sus reservas con el metal.

Rusia cambia sus reservas por oro

La fuerte demanda de oro de los bancos centrales estuvo impulsada por Rusia, con un 36% de las compras, en su intento de desvincular sus reservas del dólar. El país aumentó sus reservas en 173 toneladas. Así, Rusia conseguía hacer más líquida y segura una parte de sus reservas, al tiempo que gasta una parte en intentar frenar la depreciación de su divisa.