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RSC.- Activistas de Greenpeace protestan con el 'Rainbow Warrior' contra la deforestación de los bosques en Indonesia
Empresas que operan en el país "devoran" áreas similares a seis campos de fútbol por minuto para "alimentar" el mercado global
MADRID, 12 (EUROPA PRESS)
Activistas de Greenpeace Internacional protestaron ayer a bordo del buque insignia de la ONG, el 'Rainbow Warrior' en las costas de Papua para pedir que se detenga la destrucción de los bosques ancestrales en Indonesia entorpeciendo el paso del buque 'MV Ardhianto', cargado con un voluminoso envío de madera de algunos de los bosques más amenazados del mundo, los conocidos como 'Bosques del Paraíso de Asia y el Océano Pacífico' (Paradise Forests of Asia Pacific).
El barco estaba cargado con más de 6.000 metros cúbicos de madera de chapa destinada a Japón y Corea y 3.000 metros cúbicos cuyo mercado es Estados Unidos. La madera es propiedad de la compañía Henrison Iriana, una subsidiaria de una de las empresas de tala más grandes de Indonesia, Kayu Lapis Indonesia (KLI), que exporta principalmente a Japón, Corea y EEUU.
Papua alberga en Asia los mayores y mejor conservados bosques ancestrales del Océano Pacífico, pero en los últimos años estas reservas de la naturaleza están siendo destruidos a un ritmo "sin precedentes", según la ONG, por empresas, como KLI. "Más de 76% de la madera que sale de Indonesia, incluida Papua, es ilegal", alerta la organización en un comunicado.
La madera extraida de estos bosques es vendida con frecuencia convertida en láminas, --como hace KLI en Indonesia--, o simplemente 'desaparece' a cierta distancia de la costa para alimentar el mercado global.
"El próximo cargamento de esta madera, que se producirá en unos días, será de más de 9.000 metros cúbicos de producto convertido en láminas de chapa, el equivalente a 4.500 árboles, y que será cargados en dos barcos con destino a mercados en Asia y Estados Unidos", señalaron desde la sección de Bosques Ancestrales de Greenpeace.
"Es espantoso ver a empresas sin escrúpulos como KLI exportando los preciosos bosques antiguos de Papua y alimentando a un mercado global hambriento de madera de chapa y otros productos forestales baratos", afirman sus responsables.
Japón es el mayor importador de madera indonesia del mundo, siendo el cliente de más del 60% de la madera que salió de este país en 2005, seguido de Estados Unidos, con un 14%, Europa, con un 13% y China, con un 9%.
Greenpeace ha descubierto que KLI y Henrison Iriana recibió la madera de fuentes "dudosas" y "potencialmente ilegales" en años recientes. Estas fuentes suministraron el 53 % de la madera a sus plantas de amasado, --proceso previo al laminado del producto,-- en 2002, el 70% en 2003 y hasta el 74% en 2004.
La ONG se puso en contacto con la compañía para preguntarle sobre su política de tala y explotación forestal y con el fin de pedirle que les facilitara la documentación que mostraba exáctamente qué número de árboles tala y en qué zonas de las áreas forestales. Greenpeace pretendía con ello acudir a las zonas de tala para comprobar que no se trataba de áreas de especial protección.
DESTRUCCION EN CADENA
Los bosques de Indonesia "están siendo destruidos a una velocidad vertiginosa y mucho más rápida que en cualquier otra parte del mundo", insiste la ONG. Una zona forestal similar al tamaño de seis campos de fútbol desaparece cada minuto, alerta. En total, Indonesia ha perdido realmente más del 72% de sus bosques ancestrales y el 40%
del resto de su superficie boscosa está "totalmente destruida", sañala la organización.
"Para proteger a este y a otros bosques de compañías 'depredadoras' como éstas, los Gobiernos de los países tienen que trabajar conjuntamente para importar productos de madera procedente de talas sostenibles y no ilegales", afirma la ONG. "Si irresponsablemente seguimos sin ser conscientes de esta gran pérdida, millones de personas en todo el mundo nos veremos afectadas por la falta de unos recursos, los forestales, que nos son imprescidibles para la supervivencia", apunta la ONG.