Bolsa, mercados y cotizaciones

El BCE pasa de puntillas y sólo concreta el camino para tomar más medidas



    Tal y como se esperaba, el Banco Central Europeo (BCE) no sólo dejó sin cambios su política monetaria, sino que también intentó pasar de puntillas sobre el mercado. El objetivo parecía ser el de pasar inadvertido, una reunión neutra que no inquietase a los inversores, ni generase falsas expectativas. Si así era, desde luego que fue alcanzado.

    Ni uno solo de los expertos consultados por Bloomberg esperaba cambios en su política monetaria, y todos acertaron: el BCE mantuvo los tipos de interés oficiales en el mínimo histórico del 0,25% y la facilidad de depósito en el 0%. Además, el presidente de la entidad, Mario Draghi, volvió a remarcar que seguirán "en estos niveles o más bajos durante un periodo prolongado de tiempo".

    Sin embargo, Super Mario sí que marcó un camino claro que llevaría a la entidad a adoptar más medidas de estímulo monetario. Una primera causa sería un empeoramiento de las condiciones de inflación, siempre con un ojo puesto en el riesgo de deflación que está latente en la eurozona. Por otra parte, un aumento de la tensión financiera que volviese a aumentar la fragmentación entre los países de la eurozona también obligaría a la entidad a actuar.

    "En el fondo, pocas novedades, salvo su posición de esperar y ver acontecimientos mientras no varíen del escenario de baja inflación y moderado crecimiento", explica José Luis Martínez Campuzano, estratega de Citi en España. "Conviene destacar el reforzamiento del mensaje de tipos bajos, en apoyo de la renta variable y de la contención de los tipos a corto", explica Marián Fernández, Directora de Estrategia de Inversis Banco. De este modo, el BCE concreta más su hoja de ruta con las situaciones que deben producirse para que redoble sus estímulos monetarios. Sin embargo, Draghi no adelantó ninguna posible medida: "hemos discutido todas las políticas que nos permite nuestro mandato y la discusión todavía continúa". Los analistas barajan distintos tipos de medidas heterodoxas que se dirigirían a cualquiera de estos dos objetivos, como puede ser una nueva ronda de liquidez a la banca (LTRO) con la obligación de que esos fondos se canalicen al crédito a empresas y hogares, o situar la facilidad de depósito en negativo para forzar a la banca a que mueva su exceso de liquidez. "Esperamos nuevas medidas no convencionales desde el BCE dirigidas a incentivar el crédito en este primer trimestre", advierte el equipo de análisis de Cortal Consors.

    También se reunió el Banco de Inglaterra (BoE) y, al igual que la entidad europea, mantuvo sin cambios su política monetaria, con los tipos de interés en el 0,5% y su programa de compra de activos en 375.000 millones de libras. Mientras tanto, la economía del país sigue recuperándose con fuerza y los analistas ya ven en el horizonte la primera subida de tipos en el país.