Bolsa, mercados y cotizaciones

La retribución de Procter & Gamble es 60 veces mayor a la de los años 70



    La búsqueda de pagos periódicos con los que el inversor pueda completar su renta siempre ha estado presente en el mundo de la inversión. Es una vía que, aunque cobra especial interés en momentos como el actual, explotan desde hace años las compañías para atraer a inversores.

    Hay algunos ejemplos de grandes cotizadas estadounidenses que comenzaron a retribuir en los años 60 ó 70 con pequeñas cantidades que han aumentado y que a muchos accionistas les ha permitido la obtención de importantes rentas. "Un jubilado estadounidense que invirtió 1.000 dólares en Procter & Gamble al comienzo de su trayectoria profesional habría casi triplicado su dinero por el dividendo", señala un gestor.

    La multinacional propietaria de marcas tan conocidas como Gillette, Max Factor, Pantene, Ariel, Oral B o Fairy comenzó a retribuir en 1970 con un pago trimestral de un centavo por acción y 43 años después entrega un dividendo 60 veces mayor. Precisamente esta es una de las características que persiguen muchos profesionales que gestionan fondos de dividendo. Muchos buscan no tanto compañías con altas retribuciones, sino empresas que sean capaces de garantizar un dividendo creciente.

    La trayectoria en la política de Procter & Gamble así lo avala, pero también las previsiones de beneficio para la compañía. Después de sufrir caídas en las ganancias, los expertos estiman que el año pasado se produjo un punto de inflexión y que a partir de ahora aumentará el beneficio entre un 5 y un 10% cada año. Su próximo dividendo de 60,15 centavos por acción es el 15 de noviembre y hay que tener el título en cartera antes del miércoles para cobrarlo.