Bolsa, mercados y cotizaciones

Se cumplen cinco años del mayor batacazo del Ibex 35 con los 10.000 a tiro

  • El 10 de octubre de 2008 el índice selectivo se desplomó casi un 11% en el intradía


"Dicen que la historia se repite, lo cierto es que sus lecciones no se aprovechan", afirmaba el político y abogado francés Camille Sée. Y a pesar de que habían pasado ya 80 años, un 10 de octubre de 2008 el crac del 29 se volvía a hacer realidad. Cinco años después, el selectivo de la bolsa española está inmerso en un rally alcista que se prolonga varios días y ha batido los 9.600 puntos. Comprar bolsa española es más caro que EEUU.

La situación era muy distinta en 2008. Los selectivos europeos se desplomaban con fuerza en una caída que se pronunciaba más con la apertura de Wall Street. El pánico se extendía por todo el mundo, desde la India hasta Estados Unidos, pasando por Reino Unido, Alemania o España. De hecho, el Ibex 35 hacía historia al sufrir la mayor caída intradía desde su nacimiento. En este sentido, el índice se dejaba a media tarde casi un 11% y cerraba la sesión con un descenso del 9,14%.

En tan solo dos sesiones (las del 9 y el 10 de octubre de 2008) el principal selectivo español se había dejado un 17,16% de su capitalización y se iniciaba el descenso hacia las tinieblas que ha tenido que atravesar el índice durante los últimos años. De hecho, actualmente cotiza todavía a más de un 65% de los máximos históricos marcados en noviembre del año 2007.

No obstante, la situación hoy es bien diferente, ya que el selectivo español es uno de los más atractivos del mercado por técnico.

"Espectacular"

Carlos Doblado, jefe de estrategia de Ágora Asesores Financieros, define la recuperación firmada este miércoles por el Ibex 35 como "sencillamente espectacular". Y es que el índice español consiguió sobreponerse a las caídas de la renta variable del núcleo europeo para conseguir un avance superior al 1%, ganancias que prosiguieron ayer con un incremento superior al 2%.

Para invertir por técnico, el Ibex 35 se encuentra en una situación "alcista para trading", explica Doblado, y "sólo la pérdida de los 16.600 puntos del índice en versión total return en cierre semanal podría plantear un cambio de tendencia para trading en relación al proceso comprador retomado en el verano de 2013".

Alumnos aventajados

La recuperación que ha vivido el Ibex 35 y que le lleva a avanzar hasta niveles épicos, ha empujado a algunas compañías a hacer lo mismo. En este sentido, Jazztel se coloca a la cabeza tras multiplicar el precio de las acciones casi por siete desde la fatídica fecha.

Inditex y Viscofan se sitúan en segundo y tercer puesto al cuadriplicar y triplicar, respectivamente, el precio que lucían sus acciones el 10 de octubre de 2008. En el lado opuesto están entidades como Popular, que se sitúa el primero tras depreciarse un 77% sus acciones, o Sabadell -pierde un 52%-.

Mientras, en Wall Street se vivió ayer una jornada de recuperación que despeja ciertas nubes de preocupación sobre el movimiento de los índices estadounidenses. La de ayer fuer una "gran jornada para los alcistas que permite que se reequilibren las fuerzas de corto plazo cuando hace sólo dos sesiones se ponía sobre la mesa un mercado en completa reacción bajista", señala Doblado.

De 1929 a 2008

Dicen los sabios que de los errores se aprende, y hay quien en estos años se ha dedicado a estudiar la Historia económica para no repetir los mismos fallos... aunque también ha habido quienes han repetido todos y cada uno de los pasos equivocados. El presidente de la Reserva Federal (Fed), Ben Bernanke, un estudioso de la crisis de 1929, hizo todo lo posible para que el descalabro que se produjo en 2008 se pareciese lo mínimo posible a aquella fecha catastrófica. Y se puede decir que lo consiguió en cierta medida.

La política monetaria ultraexpansiva iniciada por la Reserva Federal y seguida posteriormente por los mayores bancos centrales del mundo evitó que se desatara una crisis de liquidez (liquidity crunch) a nivel mundial que hubiese provocado la quiebra de muchas compañías.

Los bancos centrales se erigieron como prestamistas de última instancia que salvaron a la banca y al mercado con sus continuas inyecciones de liquidez. Sin duda, su actuación ayudó a que la caída bursátil posterior a la quiebra de la estadounidense Lehman Brothers no fuese tan profunda como fue a finales de los años veinte.