Bolsa, mercados y cotizaciones
Los fondos inmobiliarios acentúan el derribo... caen un 5,6% en 2013
- El retroceso anualizado es del 5% en el último lustro
Los fondos inmobiliarios españoles se han quedado sin ningún atractivo y La Caixa ha sido la última entidad en sumarse a la moda imperante de soltar lastre en la gestión inmobiliaria. Acaba de vender el 51 por ciento de su gestora inmobiliaria Servihabitat al fondo TPG por un máximo de 188,7 millones de euros, según informó la propia entidad a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
En un entorno donde los precios de las viviendas y sus alquileres no tenían límite se trataba de fondos que actuaron como un refugio para los inversores, con los que podían obtener rentabilidades de entre el 5 y el 10% anuales. El Santander Banif Inmobiliario fue el mayor fondo de esta naturaleza en España, pero la crisis del ladrillo dimensionó en exceso estos fondos y no tuvo liquidez para atender a los reembolsos. Solucionado el problema, el fondo tiene ventanas de liquidez en las que el partícipe puede comprar y vender. También BBVA tenía un fondo inmobilario, que fue reconvertido en una sociedad inmobiliaria, ante el cambio de panorama en el mercado. Y más tarde Sabadell, y Ahorro Corporación lanzaron los suyos.
Sin embargo, la caída en el precio de la vivienda ha producido en los últimos años una continua depreciación de las carteras de estos fondos, que están registrando el peor ejercicio de los últimos diez años y caen un 5,6%.
Todavía quedan cinco fondos a disposición del inversor español. AC Patrimonio Inmobiliario FII, Bankia Inmobiliario FII, CX Propietat FII, Sabadell BS Inmobiliario FII y Santander Banif Inmobiliario FII. Pero todos ellos siguen registrando caídas. El que más cede es el de Bankia, que ha bajado más de un 10% desde enero; y el que mejor se ha comportado ha sido el de Sabadell, que apenas ha caído un 2,36% en el año. Sin embargo, la rentabilidad anualizada a cinco años refleja el mal momento por el que está pasando el sector. Los cinco fondos que quedan se dejan, de media, un 3,45%.
Esto contrasta claramente con lo que está pasando en EEUU, donde los fondos inmobiliarios cotizados, conocidos como REITs, se han beneficiado del programa de compras de activos respaldados por hipotecas que ha seguido la Fed.