Bolsa, mercados y cotizaciones
¿Es la bolsa la mejor opción para realizar una inversión?
Es decir, como máximo podría obtener dos céntimos al día por cada 100 euros puestos en el mercado. ¿Le parece poco? Es un premio muy superior al 0,004 por ciento que ha aportado el bono alemán -el título de deuda pública de referencia en la zona euro- o al 0,013 por ciento que le hubiese dado un depósito al 5 por ciento anual cada día. ¡Sí, sí...menos de un uno por ciento!
Sacar rentabilidad
Sin embargo, visto con perspectiva todo cambia. Si usted hubiese invertido 1.000 euros a principios de 1998 en el Ibex ahora tendría 1.805,1 euros, con lo que podría haber batido la inflación y sacar una jugosa rentabilidad. ¿A que ahora le parece más interesante? Además, esta plusvalía no tiene en cuenta los dividendos pagados por las empresas del indicador, que han superado de media el 2 por ciento de rentabilidad al año en los últimos diez ejercicios. Si hubiese puesto esta misma cuantía en una cuenta remunerada -por ejemplo en una que ofreciese un 3,5 por ciento al año- tendría la mitad de ganancias: 1.410 euros.
Por eso, elegir entre una u otra opción dependerá de su perfil de riesgo. No puede olvidar que la bolsa se define como renta variable, es decir, que si decide meter su dinero no tendrá asegurada un rentabilidad anual, por lo que le puede ir bien, como en los últimos cinco años en los que el Ibex 35 ha subido más de un 140 por ciento en total, o le puede ir mal, como está ocurriendo en 2008 -el índice de referencia se deja un 7 por ciento desde el 1 de enero-.
La volatilidad de la bolsa española
Por eso, si decide entrar en este tipo de activo tampoco puede olvidar el alto riesgo que tiene asociado. Por ejemplo, la bolsa española ha tenido una volatilidad en los últimos cursos superior al 20 por ciento al año. Según diversos estudios, con este porcentaje, si bien se podría ganar más de un 57 por ciento al año como máximo, también se podía perder un 45 por ciento.
Por el contrario, si lo que usted busca es poder dormir tranquilo debería invertir en otras alternativas como la renta fija o los depósitos. Los títulos de deuda pública son relativamente seguros, siempre y cuando la rentabilidad que le ofrezcan supere la inflación y usted mantenga el bono o la letra hasta el vencimiento del título. De esta forma, obtiene un rendimiento anual fijo, que conoce de antemano.
Bajos tipos de interés
No obstante, los irrisorios bajos tipos de interés de los últimos ejercicios en la zona euro, que llegaron a estar en el 2 por ciento durante año y medio -desde junio 2003 hasta diciembre de 2005-, provocaron que este tipo de productos no fuesen atractivos para el inversor, ya que no conseguían superar el coste de la vida del momento. Un claro ejemplo se ha podido ver en el bono alemán, que ha dado una rentabilidad inferior al 1 por ciento al año desde 1998, aunque el riesgo asociado, la citada volatilidad, es cuatro veces inferior a la bolsa : un 5 por ciento al año.
En la actualidad, este activo ofrece un 4,09 por ciento, mientras que el español se encuentra en el 4,35 por ciento, una rentabilidad que casi se come la inflación, que el pasado mes se situó en el 4,5 por ciento en España. Esta realidad también se ha repetido en los depósitos o cuentas remuneradas en los pasados ejercicios. Por ejemplo, hace cuatro años, los depósitos en España tan sólo rentaban un 2,24 por ciento, mientras que la inflación se encontraba en el 3,5 por ciento ese ejercicio.
Más rentabilidad
Sin embargo, la actual crisis crediticia ha desatado una guerra entre las entidades, que necesitan captar depósitos para mejorar su balance, lo que ha desencadenado un incremento de la rentabilidad de este tipo de activos. Ahora un depósito le puede dar una rentabilidad superior al 5 por ciento TAE (tasa anual equivalente) si busca entre los más competitivos del mercado, con lo que podría superar la inflación. En la actual oferta de la banca, las grandes oportunidades se encuentran en depósitos por encima del 4,5 por ciento, aunque la media del sector ofrece rentabilidades por debajo de ese porcentaje.
Ahora, uno de los más interesantes del mercado es el de Openbank, que da a los nuevos clientes un 5,25 por ciento TAE a doce meses si se invierte desde un euro hasta 5 millones. De cerca le sigue el de Bancaja, que renta un 5 por ciento TAE a un año si se invierte como mínimo 300 euros en el Depósito Flexible.
Por eso, en toda inversión usted tiene que decidir si prefiere dormir bien o comer bien, aunque pase sueño. Si se inclina por el primer caso, debe buscar activos que renten más que el coste de la vida y que le aseguren en todo momento el principal. Sin embargo, si es uno de los inversores que no tiene miedo al riesgo, tan sólo en la bolsa podría encontrar ahora rentabilidades superiores al 5 por ciento. Eso sí, con un importante riesgo asociado, que le puede desvelar más de una noche. ¿Por qué se decide? Sólo usted tiene la decisión.