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Roubini: "España deberá hacer una quita de su deuda"
La tensa calma se cierne sobre la economía mundial. El conocido como doctor calamidad, Nouriel Roubini, mantuvo una conferencia telefónica para ofrecer sus perspectivas sobre el contexto económico en el que se mueve en estos momentos el planeta.
En estos menesteres, el presidente de Roubini Global Economics (RGE) reconoció que, pese a que los riesgos en la eurozona han disminuido sensiblemente, los ratios de deuda respecto al PIB en países como España, Italia o Grecia "serán insostenibles" y durante los próximos años "acabaremos viendo una reestructuración ordenada de su deuda". Mientras tanto, los mercados emergentes podrían sufrir la "tormenta perfecta" si la Reserva Federal sigue adelante con su posible decisión de disminuir sus estímulos a finales de año. A ello habría que sumar el parón en China cuyo frenazo el año que viene podría dejar a la segunda economía del mundo creciendo un 6% antes de despedir 2014.
Al ser preguntado por elEconomista sobre sus proyecciones en España, Italia y la zona euro en su conjunto, Roubini reconoció que los riesgos han disminuido respecto al año pasado. Desde su punto de vista ya no existe un miedo a la ruptura de la zona del euro, motivada por una salida de Grecia o las dudas sobre la imposibilidad de Italia o España de financiarse en los mercados. Así, la intercesión de cuatro factores (el BCE, el Mecanismo Europeo de Estabilidad, el intento de una Unión Bancaria y el intento alemán por entender la zona euro como un proyecto político) han ayudado a disminuir los riesgos.
Dicho esto, Roubini sigue viendo el crecimiento para la eurozona en 2014 como "mediocre". Según advirtió, la debilidad se ha contagiado ya a otros países del núcleo, como Francia, y debilita ya a la economía alemana. "El crecimiento potencial seguirá siendo bajo y seguimos sumidos en una recesión", estimó mientras apuntó que la austeridad fiscal y la ausencia de crédito siguen pasando factura. Es por ello que no descartó que el BCE actuase de forma rezagada frente a la Fed o al Banco de Japón y relaje aún más su política monetaria para dar algo de oxígeno a Europa.
Al fin y al cabo, aunque el año que viene la zona euro en su conjunto pueda crecer tímidamente, no logrará corregir la situación que vive la periferia. De ahí que con niveles de deuda insostenibles a medio y largo plazo países como Grecia, España, Portugal, Irlanda, Italia, Chipre y Eslovenia acabarán por tener que reestructurar su deuda.
Roubini destacó que existe una "fatiga por la austeridad" en la periferia y adelantó que los avances hacia una unión fiscal se han "congelado". Además indicó que el progreso hacia una unión bancaria acabará por debilitarse mientras alertó sobre el aumento de "mayor incertidumbre política", especialmente para Italia, donde predijo que el Gobierno de Letta colapsará el año que viene provocando de nuevo la necesidad de elecciones. En el caso griego, también indicó un colapso de la coalición actual que obligará a convocar comicios de nuevo probablemente a finales de este año.