Bolsa, mercados y cotizaciones
Asegurarse de un impago de Arcelor o IAG es más caro que en la gran banca
- El precio de cubrirse en ellos es mucho más alto que en BBVA y el Santander
- Popular y Sabadell son las entidades con mayor percepción de riesgo
Cada golpe de esta crisis ha tenido un claro epicentro: la banca. En especial, la de países periféricos y, últimamente, la percepción de riesgo en torno a las entidades italianas y españolas ha ido en aumento. Esas dudas no sólo se reflejan en la cotización de la banca, que suele sufrir con acontecimientos como el que sucedió ayer, cuando Bruselas admitió que los grandes depósitos pueden tener que asumir quitas en futuros rescates de la Eurozona. Otro reflejo de la desconfianza son los seguros de impago, o CDS por sus siglas en inglés.
Para asegurar un millón de deuda española, un inversor tendría que desembolsar unos 22.000 euros, muy lejos de los más de 60.000 que exigía el mercado en el mes de julio, pero por encima de la media de los últimos tres meses, a causa del revuelo en torno al rescate a Chipre. Sin embargo, aunque la lógica lleva a pensar que el centro de las dudas, la banca, es lo más caro de asegurar ante un impago, la realidad es diferente.
Sí es cierto que el mercado exige mucho más por asegurar la deuda de entidades de menor tamaño y más ligadas al mercado español, como Sabadell o Popular, que en el caso de Santander o BBVA. "Normalmente, cuando se toman decisiones de cobertura no es exactamente que se esté apostando a que determinados bancos quiebren, es que a la hora de cubrir riesgo se suele hacer en entidades grandes porque es más barato", señala Juan Ramón Caridad, Director del Master de Finanzas FIA. Pero lo curioso es que es más caro cubrirse ante un impago de IAG o de ArcelorMittal, que hacerlo frente a las dos grandes entidades españolas o incluso a Bankinter, por mucho que esta crisis sea financiera.
En estos momentos, por asegurar cada millón de deuda de Santander, el inversor debe desembolsar 29.700 euros, mientras que para hacerlo con BBVA se exigen 1.800 euros más, según Bloomberg. Pero quienes se llevan la palma son IAG y Arcelor: asegurarse frente al impago de la aerolínea es un 40 por ciento más caro que en el caso de Santander y un 31 por ciento sobre Bankinter. La percepción de riesgo también es un 25 por ciento superior en Arcelor que en la entidad que preside Emilio Botín.
No es que esto sea algo que ha revelado el último envite de la crisis, sino que en los últimos años, siempre ha sucedido así. Caridad explica la razón de que sean menos comparables: "Santander y BBVA son entidades muy globales, es decir, cuando compras un CDS no estás cubriéndote contra el riesgo de España, sino frente al riesgo global. La otra razón es que en muchos casos, esas compañías están apalancadas [tienen un elevado endeudamiento], por lo que difieren riesgo financiero". Este experto explica que la posibilidad de operaciones corporativas o de recompras de títulos suele "abrir los spreads y la mejor forma de apostar contra eso es comprar CDS", de ahí que el precio sea mayor.
Dos valores con incertidumbre
IAG y Arcelor tienen su dósis de dudas en el momento actual. "Son compañías cíclicas, por lo que están más expuestas al ciclo económico", indica Rafael Romero desde Unicorp. En el caso de IAG, los ojos del mercado están puestos principalmente en la reestructuración de Iberia: "va a ser más cara de lo que se esperaba en un principio y, además, se va a retrasar, ya que el objetivo era que estuviese terminada para el próximo lunes", señala Ivan Sanfélix, desde Renta 4. Algo que no va a ser posible, al menos, por la parte que le toca a Vueling. Después de que la aerolínea de bajo coste rechazase la OPA que lanzó IAG a 7 euros, el mercado está a la expectativa de si se mejorará la oferta, y las valoraciones de los analistas se sitúan ya en los 9,5 euros.
Por otro lado, Arcelor está amenazada con salir del índice EuroStoxx 50 y su cotización está en mínimos desde 2004. Después de perder el grado de inversión en el mes de agosto, "su objetivo es reducir la deuda a 17.000 millones de dólares en el primer semestre del año", indica Sanfélix, y el consenso de mercado recogido por FactSet descuenta que lo cumplirá. Arcelor señala que el segundo semestre de 2012 marcó la parte más baja del ciclo, aunque las previsiones de beneficio de los analistas siguen cayendo. En el último trimestre las expectativas han cedido más de un 10 por ciento para este año y el próximo.