Bolsa, mercados y cotizaciones
La ruptura del matrimonio EADS y BAE sólo beneficia al dueño de Airbus
Los analistas vuelven a ver una clara oportunidad de compra en el conglomerado continentalLa firma británica no consigue levantar el vuelo como el 'holding' aerospacial centroeuropeo
Al igual que en las relaciones personales, hay veces que dos empresas están destinadas a romper el vínculo que mantienen entre ellas y a no estar juntas nunca. Este parece ser el caso de los gigantes europeos EADS (EAD.MC) y BAE (BA..LO). Ambas compañías estuvieron muy cerca de fusionarse para dar lugar a un gigante europeo en el sector.
El matrimonio era perfecto sobre el papel. La fusión suponía para EADS la entrada por la puerta grande en el mercado norteamericano de su filial de aviones comerciales -Airbus- tras varias decepciones como el fallido contrato de los aviones cisterna, que ganó su eterno rival Boeing. Al mismo tiempo, blindaba su proyecto recién anunciado de abrir una planta en Alabama para fabricar el A320, el avión comercial de pasillo único que más ingresos ha proporcionado al grupo.
Ruptura de negociaciones
Sin embargo, el acuerdo entre ambas compañías finalmente no llegó a buen puerto. El pasado 10 de octubre de 2012 ambas entidades hacían público un comunicado que anunciaba la ruptura de las negociaciones entre las dos firmas al no haber alcanzado un entendimiento con los gobiernos centrales de los países implicados en la operación, es decir, los ejecutivos de Alemania, Francia y Reino Unido.
No obstante las reacciones de las casas de análisis a esta falta de entendimiento fueron dispares. Mientras que en el caso de EADS la respuesta vino en forma de una sustancial mejora de su recomendación, en el caso de la compañía británica no ha traído un cambio positivo en el consejo que la media de firmas de inversión le otorgan. Algo parecido ocurre con la valoración de los expertos sobre las dos compañías tras la ruptura de las negociaciones entre ambas.
Mientras que EADS ha registrado desde el 10 de octubre un aumento en su precio objetivo superior al 30%, las casas de inversión apenas han elevado en cerca de un 2% la valoración de BAE Systems. El hecho provoca que la firma con sede social en Reino Unido cotice muy por encima del nivel al que los analistas estiman que deben tender sus acciones en los próximos doce meses.
En el caso de las estimaciones de beneficio para el conjunto de 2014, los analistas también se decantan por EADS como la empresa más beneficiada tras el citado divorcio. De hecho, la media de firmas de inversión que recoge FactSet ha elevado en más de un 5% sus previsiones de ganancias netas para el conjunto de 2014, mientras que en el caso de BAE, se produce la situación opuesta, ya que en el mismo periodo de tiempo se han reducido las estimaciones de beneficio para dicho año en cerca de un 10%.
Y es que a EADS le sienta mucho mejor volar sola que a BAE. ¿El motivo? Los proyectos que en los próximos años espera la compañía para catapultar sus resultados. El primero llega ya está primavera. Tras recibir los permisos de las autoridades aeronáuticas, el avión de transporte militar A400M, que se ensambla en la fábrica de EADS en San Pablo (Sevilla), se entregará al primer cliente (Francia) en las próximas semanas. Ello supondrá un pistoletazo de salida a la campaña comercial del proyecto hacia nuevos clientes que no son los del lanzamiento. Desde Airbus Military, filial de Airbus que engloba los activos de la antigua Construccciones Aeronáuticas (Casa), se espera que el avión tenga un mercado potencial de 500 aparatos en veinte años, lo que supondría unos ingresos de 100.000 millones de euros.