Bolsa, mercados y cotizaciones

España y Portugal se descuelgan de un fulgurante arranque de año en bolsa



    Habrá que esperar. La bolsa española volvió a desmarcarse del resto de los grandes indicadores europeos al ser el Ibex 35, junto con el PSI 20 portugués, los únicos en cerrar enero en negativo. El índice español comienza febrero en los 8.509 puntos y con una caída acumulada del 0,67%, que poco tiene que ver con la evolución de sus homólogos. El acuerdo para alcanzar un pacto fiscal en Europa, que incluye un déficit anual máximo del 0,5% del PIB y mecanismos de corrección automáticos y sanciones, ha sido la espoleta definitiva para aupar al refugio germano hasta su mejor enero desde 1975 al subir un 9,5% (ver gráfico).

    La economía española sigue dando muestras de debilidad. La flaqueza de la banca, patente por las enormes partidas destinadas a provisiones, sigue siendo el principal lastre de un índice que no alcanza los 9.000 puntos desde el mes de octubre. Síntomas de flaqueza que no hicieron más que confirmarse cuando la semana pasada Fitch siguió los pasos de S&P al recortar el rating del Reino de España y cuando la economía registró un crecimiento del 0,3% negativo en el cuarto trimestre de 2011, poniendo en evidencia que la recesión ya no era una suposición sino una realidad que se confirmará el próximo trimestre.

    Sin embargo, hay quienes ven grandes oportunidades detrás de esos números rojos. "La reacción de las bolsas demuestra que hay apetito por el riesgo y que los inversores han iniciado el año con poco riesgo en las carteras. Esto beneficia a que veamos entradas de dinero tras cada recorte", asegura Miguel Ángel Paz, analista de Unicorp. Por lo pronto, IAG, las acereras (ArcelorMittal y Acerinox) y Bankinter son los valores más alcistas del Ibex 35 en lo que va de ejercicio. Y es que pese a las incertidumbres que rodean al sector financiero en torno a la reestructuración del sector y a si llegará a cumplir las exigencias impuestas desde Bruselas en el plazo acordado, el sector bancario europeo es en 2012 uno de los cuatro más alcistas sustentado (entre otras cosas) en las ayudas recibidas por el Banco Central Europeo (BCE), que realizará el 29 de febrero la segunda y previsiblemente última subasta de liquidez ilimitada por la que las entidades de la eurozona pretenden exceder en dos y hasta en tres veces la liquidez solicitada en la anterior.

    Las últimas medidas acordadas en el seno de Europa han sido mejor recibidas en los parqués internacionales, que además cuentan con mejores perspectivas macroeconómicas. El Bovespa brasileño y el Hang Seng chino se despiden con subidas superiores al 10%, mientras que el japonés Nikkei 225 logra cerrar su mejor mes de enero desde 1999 al revalorizarse más de un 4% y con el mejor dato de producción industrial en siete meses.

    En Estados Unidos es el Nasdaq 100 el indicador más alcista al repuntar cerca de un 8% en un mes marcado sobre todo por las desorbitadas cifras que presentó el gigante tecnológico Apple.

    ¡Stop, prima de riesgo!

    El termómetro del riesgo ha dado un respiro en el mes de enero. La disposición de las autoridades europeas a atajar los desequilibrios de las economías y difuminar las incertidumbres ha provocado una distensión de la prima de riesgo española. El diferencial español -medido por la diferencia entre el bono español a 10 años y su homólogo alemán- se redujo desde los 326 puntos básicos de finales de diciembre a 319 puntos básicos. Una relajación que coincide con que el rendimiento del bono español a 10 años no ha visto el 6% en todo el mes, e incluso se ha situado por debajo del 5% en dos sesiones.

    La relajación del mercado de deuda español fue mayor en Italia y Francia. Tras los temores que revolotearon en ambos mercados (en el primer caso por la necesidad de un posible rescate y en Francia por el temor a que perdiera la triple A y por las dudas de solvencia de su banca), la prima de riesgo transalpina se desplomó un 21% al caer desde los 528 a los 417 puntos básicos. El descenso en el caso del termómetro del riesgo galo llevó a su diferencial a los 126 puntos básicos, desde los 132.

    En esta ocasión, la nota discordante la pusieron Portugal e Irlanda. Después de las especulaciones sobre un nuevo rescate de la economía lusa, la rentabilidad de su deuda alcanzó máximos hace dos días. Su diferencial alcanzaba en el día de ayer los 1.461 puntos básicos (llegó a superar los 1.500 puntos básicos), un 27% más que hace un mes, mientras que el de Irlanda ronda los 642 puntos (un 0,65% más).

    Ojo con el 'Brent'

    El embargo de Europa al petróleo de Irán como respuesta a la intención del país de interrumpir el flujo por el estrecho de Ormuz ha incrementado el precio del barril Brent -de referencia en Europa- más de un 3% en enero, hasta los 110,8 dólares, ampliando la horquilla en más de 12 dólares con el estadounidense West Texas.

    El comportamiento al alza del petróleo era algo que ya contemplaban el mercado. "Las presiones sobre las exportaciones de crudo en Irán podrían suponer un incremento de los precios del petróleo del 20- 30%", según el FMI.

    Por su parte, el precio de la onza de oro ascendió hasta los 1.732 dólares en un mes en el que el euro consiguió ganar terreno al billete verde (ver gráfico), hasta intercambiarse a 1,3 dólares.