Bolsa, mercados y cotizaciones
El tonel de beneficios se llenará más en EEUU que en la eurozona
Los expertos esperan beneficios históricos en el S&P 500 en un momento en el que la zona euro se enfrentará a una nueva recesión o en el mejor de los casos a mínimos crecimientos.
Un mundo a dos velocidades. Las perspectivas de crecimiento moderado de la economía de Estados Unidos para 2012 y el beneficio histórico de 993.000 millones de dólares estimado en el S&P 500 son algunas de las cuestiones que reiteran la enorme divergencia que existe con Europa, donde los expertos pronostican una recesión en varios países del euro y unos resultados muy alejados de la cifra récord de 2007. La falta de confianza en torno al euro lleva a las casas de análisis a esperar que las compañías del EuroStoxx 50 salden este ejercicio con unas ganancias de 189.340 millones de euros, un 13,4% menos que hace cinco años.
En Estados Unidos son visibles los signos de recuperación cuatro años después de que la crisis de las hipotecas subprime y la caída de Lehman en septiembre de 2008 pusiera patas arriba al sistema financiero mundial y, en definitiva, a los mercados globales. La rapidez con que se tomaron entonces las medidas para evitar un colapso y su menor exposición a los problemas de deuda soberana permiten a la primera potencia económica ir por delante del Viejo Continente en la superación de la crisis. El ritmo desacompasado de ambas economías se puso en evidencia una vez más a finales de 2011, cuando los indicadores estadounidenses brindaron rentabilidades positivas al cierre del ejercicio (los de la eurozona se despidieron con caídas de doble dígito) y las cuentas de resultados en Estados Unidos volvían a mejorar por tercer año consecutivo. Y ahora, en 2012, los expertos estiman que el S&P 500 podría sumar sus mayores beneficios de la historia tras contemplar recortes en tan sólo el 20% de las compañías que lo componen.
El optimismo económico que se augura en Estados Unidos sin necesidad de haber recurrido a nuevas medidas de estímulo (QE3) ha dejado también constancia en el sentimiento de los inversores y en su divisa. En estos momentos, los datos de la última encuesta sobre sentimiento de mercado realizada por la American Association of Individual Investors (Asociación Americana de Inversores Individuales) pone de manifiesto que los alcistas se sitúan en máximos desde enero de 2011 al situarse en el 49%, frente a apenas un 17% de inversores que prefirió mantenerse a la baja. En el mercado de divisas el optimismo se ha traducido al mismo tiempo en una moneda más fuerte. En lo que va de año, el euro ha cedido cerca de un 6% frente al billete verde y se sitúa en mínimos desde el verano de 2010 al cambiarse por 1,265 dólares.
Las perspectivas en el caso de la Eurozona son menos positivas porque aunque se espera una mejora de resultados del 11,6% con respecto a 2011, tras los descensos del 4% del año pasado, su beneficio tiene una evolución más irregular. Y es que los mercados todavía arrastran las consecuencias de la crisis de deuda soberana y la inestabilidad del sector bancario ante las necesidades de recapitalizarse, además de las dificultades que tiene para captar financiación. "La Fed parece mucho más dispuesta que el Banco Central Europeo (BCE) a poner todos los medios necesarios en favor de la banca para apoyar la recuperación económica", apunta Covadonga Fernández, analista de Selfbank.
Para el presente ejercicio, las casas de análisis esperan que el beneficio de 11 de las 50 compañías del EuroStoxx 50 (el 32% del índice) disminuya. En esta ocasión las caídas de beneficios netos estarán enfocadas principalmente en las automovilísticas tras la espectacularidad de los resultados que obtuvieron en 2011.
Buen año para las tecnológicas en EEUU
Los datos macroeconómicos siguen adelantando un año complicado para la economía. La elevada tasa de desempleo y el endeudamiento de los Estados siguen traduciéndose en continuas rebajas de crecimiento en la eurozona y en rumores de posibles recortes de su calificación crediticia ante las expectativas de que no se pueda cumplir con los objetivos de déficit. Ante estas incertidumbres, las casas de análisis siguen decantándose por Estados Unidos, cuyos datos macroeconómicos son generalmente más alentadores al dejar entrever cierta mejora en mercados como el laboral y el inmobiliario.
Apoyándose en las expectativas de crecimiento, aunque mínimo, los expertos esperan que algunas compañías puedan aumentar notablemente sus resultados. Entre las empresas de mayor tamaño del S&P 500 -aquellas con una capitalización de más de 60.000 millones de dólares- se espera que los mayores incrementos se produzcan en Bank of America y en valores tecnológicos.
El cuarto banco de Estados Unidos por tamaño bursátil presentará, según los expertos, unas ganancias de 10.500 millones de dólares, frente a los 440 millones estimados para 2011. La gran banca estadounidense será una de las que más despegará este año al prever que vuelva a beneficios previos a Lehman Brothers e incluso a ganancias históricas en bancos como Wells Fargo, U.S. Bancorp y J.P. Morgan. Los expertos consideran que tras las abundantes ayudas públicas que recibieron para evitar un colapso de la economía mundial, el sector goza de unos balances razonablemente saneados aunque todavía los precios están muy lejos de los de entonces. Un ejemplo: Bank of America cotizaba en septiembre de 2008 en 38 dólares y ahora lo hace en 6,6 y Goldman Sachs, por ejemplo, lo hacía en 170 dólares y ahora cotiza en 98.
"Los bancos están en buena forma y la fuerte correción de los excesos en el sector inmobiliario ya casi se ha producido", afirma Phillippe Uzan, de EdRAM. Covadonga Fernández, de SelfBank, apunta también a los niveles de morosidad. "La tasa de morosidad es inferior con una media del 2% frente al 3,75% de los europeos", asegura.
El sector tecnológico parece dispuesto a seguir dando que hablar este año. Tras un ejercicio de grandes acontecimientos en el mundo de la tecnología, los expertos prevén que hasta seis tecnológicas -Amazon, Cisco, Qualcom, Apple, Google y Comcast (por este orden)- se cuelen entre los valores de mayor tamaño en los que se verán los incrementos más pronunciados. El gigante Apple podría alcanzar 33.000 millones de dólares en beneficio pese a haber incrementado sus resultados un 85% el año pasado. La compañía de la manzana y fabricante del famoso iPhone tiene por delante el lanzamiento de su próximo tablet, que se rumorea que se presentará en el mes de marzo.
Junto a éstas, que también se ganan el favor de los expertos en cuanto a recomendación al aconsejar comprar los títulos de todas ellas, hay que sumar las positivas previsiones que se manejan para Berkshire (el holding de inversión de Warren Buffett), para la compañía de servicios petrolíferos Schlumberger, para la empresa de maquinaria de construcción Caterpillar y para la teleco Verizon y la compañía eléctrica General Electric.
¿Y en la zona euro?
Las esporádicas compras de bonos periféricos y la subasta ilimitada de liquidez a la banca por parte del BCE no terminan de generar la confianza necesaria como para que la eurozona evite la recesión. Incentivar el crecimiento, frenar el elevado déficit público y reforzar a los bancos son algunas de las claves de 2012.
Los recortes de beneficios que sufrió el año pasado el sistema financiero como consecuencia de la crisis de deuda soberana parece que se contrarrestarán con importantes repuntes en algunos de los casos. Y es que entre los grandes valores del EuroStoxx 50 -considerando como tal a aquellos que tienen un valor bursátil superior a los 30.000 millones de euros- destaca el incremento de beneficios esperado en Allianz. Aunque no son comparables a los que reunió en 2006 y 2007, que superaron los 7.000 millones de euros, hasta 5.100 millones es lo que se estima que pueda acumular en beneficios la aseguradora alemana, una cifra un 55% superior a las ganancias de 2011.
Telefónica también concentra algunas de las perspectivas más halagüeñas. Tras despedir 2011 con la necesidad de reducir su política de retribución, los expertos consideran que la teleco española volverá a beneficios similares a los de 2008 y 2007. Inditex y Santander serán previsiblemente los otros valores españoles que se colarán entre los mayores incrementos.
A pesar de las exigencias impuestas desde Europa y de la inestabilidad del negocio financiero, el banco reiterará su liderazgo de beneficios en el Ibex a costa de las desinversiones realizadas en Latinoamérica al esperar ganancias de 7.815 millones en 2012, un 5% más que en 2011. Por su parte la textil gallega, que tiene como países clave para el crecimiento del grupo a China, Rusia y Brasil, podría alcanzar los 2.150 millones.
Los incrementos serán de entre el 10 y el 20% en el caso de Anheuser, Bayer, LVMH y BNP Paribas, mientras que los de Eni, Unilever y L'Oreal serán inferiores al 10%.