Bolsa, mercados y cotizaciones
Remedios contra la indecisión bursátil
Si está buscando estrategias defensivas para blindar su cartera, no pierda de vista la industria de la salud. Donde los bancos de inversión encuentran más valor es en compañías pequeñas, como Grifols o Watson Pharma, pero sin olvidarse de Pfizer, el gigante del sector.
Es cierto que el sentimiento alcista se sigue abriendo camino en los principales mercados del mundo, tanto desarrollados como emergentes. Pero no es menos cierto que gran parte de los movimientos de las bolsas en los primeros meses del año no han estado dictados exclusivamente por datos económicos, sino por acontecimientos internacionales, como los procedentes de Oriente Medio y Japón. Sin ir más lejos, la semana pasada regresó la crisis de la deuda soberana, cuando los mercados ya daban por descontado que el rescate de Portugal sería el último. Por ello, si quiere blindarse contra la indecisión bursátil, en esta entrega del Detector de Tesoros hemos optado por hablarle de las estrategias de uno de los sectores tradicionalmente defensivos que tenemos en cartera, el farmacéutico.
Actualmente, son tres las compañías dedicadas a la industria de la salud que brillan en la cartera del Detector: las norteamericanas Pfizer y Watson Pharmaceuticals y la española Grifols. El consenso de mercado estima que estamos en el momento oportuno para incluir las acciones de las tres en cartera.
El tamaño no siempre importa
La farmacéutica que ostenta un consejo de compra más claro es Pfizer. Con una capitalización en torno a 113.000 millones de euros, se sitúa a la cabeza de la industria farmacéutica, seguida muy de cerca por Johnson & Johnson. Al revisar las previsiones que maneja la media de bancos de análisis para esta compañía, lo más llamativo es su escasísimo grado de apalancamiento: su beneficio operativo (ebitda) para 2011 está en torno a los 21.800 millones, que en términos proporcionales equivale a más de cuatro veces la deuda neta que tendrá que afrontar la compañía para este ejercicio, unos 4.650 millones.
El valor también ofrece descuento por PER (veces que se recoge el beneficio en el precio de la acción), puesto que su ratio para 2011 se sitúa en 9,1 veces, frente a las 9,36 veces que arroja el promedio de los últimos cinco años. Por último, de las tres estrategias sobre farmacéuticas abiertas en la herramienta de inversiones internacionales de elEconomista, es donde los bancos de inversión ven más potencial: al situar su precio objetivo en los 15,87 euros, al valor todavía le queda un recorrido en bolsa cercano al 12,5 por ciento a doce meses.
Sin embargo, Pfizer cuenta con dos puntos flacos que el inversor no debe ignorar a la hora de definir su estrategia. Por un lado, las ganancias que registrará al acabar este ejercicio serán casi un 10 por ciento inferiores a las de 2010. Un beneficio neto, por otra parte, que la compañía no será capaz de incrementar de cara a 2012: así lo reflejan las estimaciones del consenso, que estiman ganancias de alrededor de 12.100 millones para los dos ejercicios. Por otra parte, las previsiones sobre las ventas que recoge el consenso de mercado son negativas, pues reflejan una caída progresiva, desde los 50.545 millones con los que terminó 2010 hasta los 43.450 millones para el año que viene. En parte, el problema viene de que a la compañía están a punto de vencerle las patentes de varios medicamentos superventas, entre ellos Lipitor y Viagra. Estos problemas no afectan ni a Grifols ni a Watson Pharmaceutical, que en comparación con Pfizer es como si David luchase contra Goliat: el valor en bolsa del fabricante de hemoderivados es de 2.700 millones de euros, mientras que el fabricante de medicamentos genéricos vale unos 5.000 millones en el mercado.
Watson tiene en común con su compatriota su bajo nivel de apalancamiento, puesto que su ebitda estimado para 2011 es superior a su deuda neta. Los bancos de inversión calculán que sus ganancias con cargo a este ejercicio superarán los 350 millones, y además experimentarán un incremento del 24 por ciento para 2012, hasta llegar a los 440 millones. También ofrece descuento para el inversor por PER, pues el ratio al que cotiza (14,1 veces) es inferior a la media de los últimos cinco años y, además, se prevé que para el siguiente ejercicio descenderá hasta las 11,5 veces.
Viviendo de Talecris
De las tres estrategias, Grifols es la más alcista al avanzar un 27,3 por ciento desde el comienzo del año.
Además, a pesar de este avance, es la única con capacidad para incrementar la rentabilidad de su dividendo para los siguientes ejercicios (la relación lógica es que se incremente el rendimiento del dividendo cuanto más caiga la cotización de la compañía). De hecho, desde que comenzó a remunerar en 2006, su dividendo se ha incrementado de forma constante y ascendente. Este año, el rendimiento del fabricante de hemoderivados alcanzará el 2,35 por ciento. A falta de la confirmación de la compañía, los analistas estiman que entregue un pago de 0,13 euros por acción el 1 de julio.
Al margen del buen tono que ofrece el grupo que controla la familia Grifols, tanto por fundamentales como por análisis tendencial (en Ecotrader se ha abierto una operativa alcista con la vista puesta en el nivel de los 12,8- 13,2 euros), ésta ha conseguido enganchar a analistas e inversores gracias a la compra de Talecris. La adquisición del fabricante de plasma, que garantiza la presencia de la española en el mercado norteamericano, fue especialmente útil durante los momentos de mayor tensión de la crisis de la deuda soberana. Así lo recoge la firma AlphaValue en su informe sobre compañías ibéricas destacadas: "Hay dos caras de Iberia. Una es la selección de fuerte consumo e historias industriales que apenas han sido penalizadas por su bandera, como es Grifols".
Pese a que el cierre de las condiciones de la compra se está retrasando más de lo normal -Grifols preveía haber terminado el proceso en el último cuatrimestre de 2010, pero ha tenido que retrasar la fecha hasta el 30 de junio-, los expertos todavía siguen viendo valor en la operación. La media de analistas que recoge FactSet estima que la farmacéutica puede llegar a cotizar a 13,6 euros, lo que significa que todavía le ve a Grifols un recorrido del 7 por ciento a 12 meses.
También corre a su favor que se haya incrementado el número de alcistas desde que anunció la operación. Según informaciones de Bloomberg, los inversores que hubiesen entrado en la compañía española en los primeros estadios de la operación obtendrán un retorno de hasta el 60 por ciento para cuando se cierre definitivamente la compra de Talecris.