Bolsa, mercados y cotizaciones

El alto precio del petróleo prolonga la 'edad dorada' en las bolsas de la OPEP



    Los mercados bursátiles de los países de la OPEP están viviendo su edad dorada de la mano de los altos precios del crudo. La escalada que el oro negro ha protagonizado desde comienzos de 2002 ha sumido a los parqués de Indonesia, Kuwait, Nigeria, Arabia Saudí, Qatar, Emiratos Árabes y Venezuela, los siete de los doce países integrantes del cártel que cuentan con mercados de valores, en una continua espiral alcista que se ha apoyado en la escalada del crudo.

    Para valorar la racha que acompaña a estos parqués hay que remontarse hasta finales de 2001. En ese momento, tanto el barril de petróleo Brent como el West Texas Intermediate (WTI), que son los que se toman de referencia en Europa y Estados Unidos respectivamente, se encontraban por debajo de los 20 dólares.

    En máximos

    La propia cesta de petróleo de la OPEP (Organización de los Países Exportadores de Petróleo), elaborada por el organismo a partir de la combinación de once tipos distintos de crudo, reflejó un precio medio de 23,12 dólares en 2001.

    Desde esos niveles, la cotización del crudo ha registrado una escalada considerable. El barril Brent se ha disparado un 244 por ciento, hasta los 68,5 dólares; el WTI ha subido un 231 por ciento y se ha ido hasta los 65,7 dólares; y la cesta de la OPEP se ha sumado a esta tendencia con un incremento del 174 por ciento, hasta los 63,4 dólares.

    Aunque estos precios se encuentran a cierta distancia de los registrados en verano de 2006, momento en el que el petróleo se acercó a los 80 dólares, siguen siendo elevados desde el punto de vista histórico. Así, por ejemplo, el precio medio del Brent entre 1990 y 2002 se situó en los 19,5 dólares por barril.

    Subidas y algo más

    Esta escalada no sólo ha tenido su réplica correspondiente en las bolsas de la OPEP, sino que éstas han llegado a superar con creces la revalorización del crudo. Desde 2002, las subidas han oscilado entre el 108 por ciento que ha repuntado el índice de Emiratos Árabes Unidos, Tadawull All Share Index, desde que empezó 2002, hasta el 645 por ciento que se ha disparado el venezolano Índice de la Bolsa de Caracas en el mismo periodo. En conjunto, la revalorización media asciende al 340 por ciento.

    Estas ganancias resultan lógicas, puesto que responden al importante peso del oro negro en las economías de esas naciones. Así, por ejemplo, la escalada del crudo ha permitido a Venezuela crecer a una tasa media superior al 10 por ciento en los tres últimos años, ya que los ingresos procedentes del crudo representan la cuarta de parte de la economía del país latinoamericano.

    Al mismo tiempo, la subida de la cotización del petróleo ha nutrido sobremanera las reservas en divisa extranjera -o ahorros- de los integrantes de la OPEP. Los incrementos han sido sustanciales en el último lustro. Por citar los casos más notables, las reservas de Indonesia han pasado de 28.000 a 47.200 millones de dólares; las de Arabia Saudí, de 14.000 a 26.000 millones; y las de Venezuela, de 12.280 a más de 33.000 millones de dólares.

    Pero hay más. El petróleo no sólo representa una fuente de riqueza para estos países. También se está convirtiendo en una herramienta política. Los continuos desafíos de Hugo Chávez a Estados Unidos y, más aún, la tensión entre Irán y la comunidad internacional constituyen los mejores ejemplos de la presión que pueden ejercer estos países por la posesión de un activo escaso como es el petróleo.