Bolsa, mercados y cotizaciones
Más de la mitad cajas rechaza o no se plantea emisión cuotas participativas
Madrid, 25 dic (EFECOM).- Más de la mitad de las cajas de ahorros que hay en España se muestra en contra o no se plantea la emisión de cuotas participativas -instrumentos similares a las acciones, pero sin derechos políticos-, bien sea por los "peligros" que implican o por preferir otras alternativas para captar recursos.
Según datos recopilados por Efe tras consultar a las 46 cajas de ahorro sobre la posibilidad de emitir cuotas participativas, seis -Caixa Catalunya, Caixa Manlleu, Caja Granada, Kutxa, BBK y La Caixa- manifiestan su oposición a estas cuotas.
Además, algunas de ellas, como Caja Guadalajara, alertan de que podrían implicar derechos políticos, lo que afectaría a su figura jurídica al suponer la "entrada" de accionistas, al tiempo que recortarían los beneficios que se destinan a obra social.
Otras 25 cajas señalan que no tienen previsto emitir cuotas participativas, en su mayor parte al entender que no lo necesitan para captar recursos y financiación, y muestran su predilección por otros instrumentos como la deuda ordinaria, la subordinada, las titulizaciones o las participaciones preferentes.
Bancaja, por ejemplo, recuerda que ya lleva varios años recurriendo a los mercados de capitales para obtener financiación y es el mayor emisor de titulización de Europa continental.
Ante el anuncio de La Caixa, de que sacará a bolsa el próximo año su cartera de participaciones, la mayoría de las cajas destacan que no se plantean esta posibilidad debido a su tamaño, al tiempo que, en general, les parece una idea adecuada a las características de la entidad catalana.
Sin embargo, entre las que no apoyan la iniciativa, Caixa de Catalunya cree que es una "fórmula compleja y complicada que generará determinados peligros", ya que, al tener acciones, "acabará siendo mucho más importante que la propia entidad financiera, por lo que apunta a un futuro sistema de privatización, en el que el holding crecerá y la caja se convertirá en un pequeño satélite".
La segunda caja de España, Caja Madrid, prefiere recurrir a las cuotas participativas, para financiar proyectos como su expansión en el extranjero, antes que crear un holding financiero para sacar a Bolsa su cartera de participaciones industriales.
De hecho, su presidente, Miguel Blesa, ha señalado recientemente que "el día que tengamos un proyecto de crecimiento que nos exija recursos propios, no dudaremos en recurrir a las cuotas participativas, siempre que así lo apoye el consejo de administración".
Otras cajas, media docena, señalan que dependiendo de las circunstancias, pueden plantearse emitir cuotas participativas, o por lo menos no lo descartan.
Entre éstas, Caixa Galicia manifestó a Efe que, a pesar de no haber utilizado las cuotas participativas hasta ahora, "es un proyecto que se va a volver a estudiar para ver lo que se hace".
La Caja de Ahorros del Mediterráneo (CAM) señaló que, a pesar de que la posición actual "es más que suficiente" para sustentar sus planes de crecimiento, el consejo de administración podría plantearse la posibilidad de "hacer uso de este instrumento particular" en "un futuro y previo análisis exhaustivo de todas sus repercusiones".
Sobre su preferencia por las cuotas o la creación de un holding para sacar a bolsa carteras de participaciones industriales, la CAM estima que ambas opciones son "válidas" y no son incompatibles.
Caja Murcia señala que las cuotas participativas "podrían ser un instrumento adecuado para facilitar el fortalecimiento de los recursos propios, en el momento en que éstos fueran necesarios", mientras que Caja Navarra no contempla actualmente emitirlas, pero "las estudia" entre otros instrumentos y alternativas.
Caja Segovia, que ha recurrido a la captación de recursos propios mediante la deuda subordinada y participaciones preferentes, cree que tanto la emisión de cuotas como la creación de un holding son alternativas "satisfactorias y coherentes" para las cajas, dependiendo de su estructura.
Entre las cajas que no tienen previsto emitir cuotas, entidades como Ibercaja las considera un instrumento "al que acudir sólo en última instancia", debido, entre otros aspectos, a su "elevado coste frente a otras alternativas".
Otras, como Caja Cantabria o Caixa Terrasa, han decidido no emitir cuotas en su asamblea general e incluso, en el caso de BBK, a fin de evitar al máximo su aprobación, se estableció la necesidad de contar con una mayoría de dos tercios para aceptar su utilización, una mayoría similar a la requerida para, por ejemplo, aprobar la disolución de la entidad.EFECOM
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