La papelera corrige un 35% en cuatro meses y los analistas la sitúan en 6,2 eurosEl pasado 15 de marzo supuso un punto de inflexión para Ence después de que el Ejecutivo español, a través de la Abogacía del Estado, le retirase el apoyo en su conflicto legal por mantener la legalidad de la prórroga que le fue concedida en 2016 para continuar con la explotación de su fábrica de celulosa en Pontevedra hasta 2076. Esta prórroga fue recurrida por el Concello de Pontevedra, la Asociación por la Defensa de la Ría de Pontevedra y Greenpeace, pero hasta marzo la compañía contaba con el soporte del Ejecutivo, cuyo nuevo escrito explica que el plazo máximo para una prórroga debe contarse desde la fecha de la primera concesión y no puede exceder los 75 años.La planta de Pontevedra supuso el 38 por ciento del ebitda (beneficio antes de impuestos, intereses, amortizaciones y depreciaciones) del grupo en 2018. "En una primera aproximación, tomando como referencia los múltiplos de Ev/ebitda mínimos de los últimos años, supondría una valoración en torno a 4,25 euros, por lo que ante el aumento de incertidumbre recomendaríamos estar al margen del valor", advierten desde Bankinter.Así, desde esa fecha, los títulos de Ence se han dejado casi un 35 por ciento hasta situarse por debajo de los 4 euros. Para muchos es injustificado este castigo ya que aún está lejos de dirimirse un asunto que puede tardar años "y durante este tiempo la planta seguirá operativa y con los niveles actuales de precios de la celulosa, el cash flow seguirá siendo positivo", explica Gonzalo de Cueto, analista de Mirabaud. "La cotización actual se sitúa en torno a nuestro peor escenario, que es que la planta se cierre este mismo año, mientras que lo que vemos más probable es que mantenga su actividad hasta 2033", añade Íñigo Recio, analista de GVC Gaesco Beka. De igual forma, Exane BNP Paribas mantiene que "la concesión durará, al menos, hasta 2033". "Creemos que la debilidad de los precios está acabando y seguirán fuertes a largo plazo, lo que beneficiará a Ence, que es muy sensible a sus movimientos", añaden.Un 0,54% del capitalDesde la propia compañía también lo creen así y muestra de ello es que desde el allanamiento de la Dirección General de Costas, tres de los principales cargos del Consejo de Administración han comprado más de 1,33 millones de acciones, lo que supone un 0,54 por ciento del accionariado total y un 1,13 por ciento del free float. Estos son Ignacio de Colmenares, CEO y presidente de la compañía desde que Juan Luis Arregui dejó el cargo a finales de abril, También el propio Arregui, ahora presidente de honor, y José Ignacio Comenge, a través de su patrimonial Fuente Salada.En este mismo periodo, también la compañía ha llevado a cabo un programa de recompra de acciones por un importe de 14,2 millones de euros para hacerse con un máximo de 2,4 millones de acciones (un 1 por ciento del capital social de Ence), con el objetivo de acometer su programa de incentivos, del que precisamente se beneficiaron esta semana hasta ocho ejecutivos de la empresa, que han recibido un total de 525.826 acciones, según los datos compilados por Bloomberg.Entrada de gestores 'value'Además de los propios consejeros, también han querido aprovechar las caídas algunos de las gestoras value más conocidas del mercado nacional. Uno de ellos es Bestinver (según los datos de Morningstar tiene un 1,49 por ciento de su fondo de bolsa española en Ence), que cree que "la caída de la acción descuenta un escenario de precios muy bajo que parece poco probable si tenemos en cuenta que no se va a poner en marcha ninguna nueva planta hasta 2021 y sobre la concesión de Pontevedra creemos que el precio ya descuenta un escenario de no renovación". "Todo ello con una situación de bajo apalancamiento que le permite capear la volatilidad en el precio de la pasta", concluyen.Al igual que Bestinver, otros fondos de Trea y de Mutuactivos también han querido comprar sus títulos tras el desplome sufrido en el parqué de Madrid. "A pesar de ser un valor cíclico, vemos una serie de factores en el medio plazo que deben ayudar a mantener altos los precios de la celulosa", explica Joaquín Ferrer, director de producto de renta variable europea de Mutuactivos. "Además, descartamos un cierre anticipado de la planta sin que conlleve una indemnización a favor de la compañía", añade Ferrer.Desde la fecha del allanamiento por parte del Estado, los analistas han venido recortando sus valoraciones sobre la compañía. En marzo, el precio objetivo a 12 meses de sus títulos se encontraba en los 8,23 y desde entonces se ha reducido casi un 25 por ciento, hasta los 6,18 euros, lo que todavía le deja un potencial al alza de más del 60 por ciento.La recomendación, no obstante, no ha sufrido deterioro y ocupa el cuarto lugar en La Liga Ibex de elEconomista, que combina los consejos de FactSet y Bloomberg.