José Luis de Haro nueva york. Las actas de la última reunión de política monetaria del Comité de Mercados Abiertos de la Reserva Federal (FOMC, por sus siglas en inglés) celebrada el 19 y 20 de marzo demostraron que existe consenso por mantener la paciencia y no mover ficha en lo que a tipos de interés se refiere.Sin embargo, mientras más del 40 por ciento del mercado observa una bajada de tipos a finales de este año y otro 14 por ciento descuenta hasta dos, los altos funcionarios del banco central no cierran la puerta a que su próximo movimiento sea un encarecimiento del precio del dinero."Varios participantes señalaron que sus puntos de vista sobre el rango apropiado para la tasa de fondos federales podrían cambiar en cualquier dirección en función de los datos entrantes y otros desarrollos", se pudo leer en el documento que básicamente resume los puntos más importantes del encuentro.De hecho, algunos de los allí presentes dejaron claro que, si la economía evoluciona favorablemente, como se espera en estos momentos, "probablemente sería apropiado elevar modestamente el rango objetivo para la tasa de fondos federales este año". En este sentido hubo miembros que consideraron que sería apropiado endurecer la política monetaria este año si la actividad económica estadounidense avanza por encima de su potencial.Y es que, pese a las señales de desaceleración o riesgos derivados del Brexit así como de las conversaciones comerciales entre EEUU y China, la perspectiva de la Fed continuó siendo en general optimista, ya que sus miembros esperan que la actividad continúe expandiéndose, el mercado laboral se mantenga firme y la inflación se sitúe cerca del 2 por ciento. Esto se produce en un momento en que el propio presidente Donald Trump ha recalcado que la Fed debería recortar tipos y responsabiliza al banco central de la ralentización que se deja notar en la economía del país.