Los beneficios de la finlandesa Nokia impulsan el optimismo de los inversores MADRID. El dinero estaba ahí. Esperando. Sólo faltaba la chispa que lo encendiera. Y llegó. La mecha de los mercados bursátiles europeos prendió el miércoles, sesión en la que subieron más de un 1 por ciento tras el tranquilizador mensaje de la Reserva Federal (Fed), que anticipó que los tipos de interés no irán mucho más allá del 4,75 por ciento actual. Y la llama siguió encendida ayer, esta vez gracias a los brillantes resultados de la finlandesa Nokia. El mayor fabricante de teléfonos móviles del mundo anunció que en el primer trimestre de 2006 ganó 1.048 millones de euros, un 21 por ciento más que en el mismo periodo del ejercicio anterior. Además, sus ventas crecieron un 29 por ciento, hasta 9.507 millones de euros, y su cuota de mercado mundial aumentó del 32 al 35 por ciento. Todos estos números, que superaron ampliamente las previsiones, dispararon el valor de la compañía en el parqué. Los títulos de Nokia repuntaron un 5,57 por ciento, hasta los 18,4 euros, su cotización más elevada desde marzo de 2004. Junto a la empresa nórdica, la mejoría de los resultados de la discográfica británica EMI y de la química holandesa Azko Nobel, cuyas acciones avanzaron un 8,3 y 6 por ciento, respectivamente, consolidaron la confianza de los mercados. Ración de avancesEste optimismo se propagó ayer a los principales índices europeos. El más osado fue el alemán Dax Xetra, que sumó un 1,16 por ciento, hasta los 6.063,2 puntos. No estaba tan alto desde julio de 2001. En España, el Ibex 35 secundó las ganancias con un avance del 0,53 por ciento, hasta los 11.782,6 puntos. En las dos últimas jornadas, el índice de referencia de las bolsas españolas ha acumulado una revalorización del 1,7 por ciento. Lo ha hecho, además, acompañado de una mayor actividad negociadora, lo cual siempre otorga más consistencia a la subida, porque demuestra que el dinero entra en el parqué con más fuerza de lo que sale. Ayer se movieron 5.757 millones de euros, la cifra más alta de los dos últimos meses. Además del dinero, el mejor aliado del Ibex fue Santander, que subió un 1,3 por ciento, hasta los 11,85 euros. También ayudó lo suyo que el petróleo moderara su ímpetu por la tarde. Durante la sesión matinal, el barril Brent, de referencia en Europa, llegó a marcar un nuevo récord al tocar los 74,22 dólares, pero después cayó hasta los 72,5 dólares en el momento en el que las bolsas europeas cerraron. Al otro lado del Atlántico, el barril WTI, el más seguido en Estados Unidos, pasó de los 72,49 a los 71,25 dólares. Desde la vertiente económica, el descenso del índice de indicadores líderes en Estados Unidos -una referencia que anticipa cómo marchará la economía en el futuro- en marzo fue bien acogida en los parqués porque constata que a lo mejor la Fed no tiene que subir mucho más los tipos.