Los resultados se mantendrán a pesar del estancamiento de la publicidadLos dos grandes grupos de televisión españoles parecen no estar solos en el mercado del entretenimiento audiovisual y la irrupción de ofertas audiovisuales como HBO y Netflix parecen haber usurpado la estampa de toda la familia sentada junta a la hora de cenar o el conocido como prime time. Un cambio estructural en las audiencias, las formas de entretenimiento y una incertidumbre cada vez mayor sobre adónde se están mudando los anunciantes son los factores que más parecen asustar a los inversores, lo que provoca que el palo que llevan Mediaset y Atresmedia en el año sea de un 33,27 por ciento en el Ibex 35 y un 35,17 por ciento en el Mercado Continuo, respectivamente. Ambas tienen una tendencia muy parecida en el parqué y Mediaset se posiciona así como la segunda que más resta del selectivo en el año, tan solo por detrás de Dia. En medio de esta convulsión, el lunes de esta semana llegó a los mercados un viejo rumor de opa. Según ese rumor, Mediaset podía ser adquirida por su filial italiana -controlada por Silvio Berlusconi en un 41 por ciento, a través de la compañía Fininvest-, esto provocó cierto revuelo en el mercado y la firma fue la que más subió del Ibex 35 en la jornada del lunes, casi un 9,8 por ciento al cierre, aunque durante la sesión llegó a escalar hasta un 20 por ciento. Sin embargo, esa posibilidad fue oficialmente desmentida durante ese mismo día y Mediaset volvió a 6,16 euros al final de la sesión del martes, con un 7,55 por ciento de caída. En parte debido a esta pronunciada caída del precio en bolsa, en ambas compañías ha aumentado su rentabilidad por dividendo (que se calcula sobre el precio de la acción), hasta el punto de que Mediaset se posiciona como la más rentable del selectivo español con una rentabilidad del 9,55 por ciento y con un dividendo previsto en 2018 de 60 céntimos por acción; mientras que Atresmedia ofrecen una rentabilidad del 9,39 por ciento en este año con la entrega estimada de 52 céntimos. La gran incógnita sigue siendo si los resultados del sector, en su mayoría dependientes de las ventas de publicidad -y esta a su vez depende en buena parte de la audiencia-, mantienen la credibilidad de estos dividendos en los años venideros. Las ventas de publicidad estimadas para los próximos años no solo se mantienen, sino que subirán, según los datos del consenso de mercado recogidos por FactSet, un 1,1 por ciento en el caso de Mediaset y un 1,6 por ciento en el caso de su rival, Atresmedia. Desde Intermoney Valores, Virginia Pérez se muestra desconcertada: "Los datos de publicidad siempre han sido cíclicos y lo normal es que con el crecimiento de la renta de las familias, el consumo y otros indicadores, la publicidad aumentase más, sin embargo estamos viendo que tan solo se mantiene". Según la analista esto se debe a cambios coyunturales como que los grandes grupos anunciantes, tales como alimentación y distribución, están recortando su gasto en publicidad. No obstante, la televisión sigue siendo el único medio capaz de llegar a un público tan ámplio y numeroso, por eso desde la firma consideran que la publicidad de estos grupos volverá a apostar por la televisión como medio para hacer eco de sus campañas. Los resultados acompañan Los analistas vieron con buenos ojos sus últimos resultados. Desde Bankinter, consideran las cuentas de Mediaset como "un balance saneado con caja neta positiva que facilita el mantenimiento de una alta rentabilidad por dividendo". La caja de Mediaset en 2018 será de 133 millones de euros, según los datos recogidos por FactSet, y está entre los únicos cuatro valores con caja positiva del Ibex. Desde Sabadell comentaban que "los [últimos] resultados son muy buenos, dada la débil evolución del mercado publicitario" y resaltaron, además, "la gran flexibilidad de costes de la compañía". Ya que los resultados se mantienen gracias a los recortes de costes, cada vez más difíciles, y nuevas vías de ingreso como sus contenidos en Internet.