Se espera que distribuya 7.694 millones en forma de dividendos con cargo a 2018La banca española se dispone a repartir con cargo a las cuentas de este año una lluvia de dividendos de 7.694 millones de euros, según las previsiones del consenso. Esta cifra será la más alta desde 2014, pero la diferencia fundamental con respecto a ese ejercicio será la casi total ausencia de pagos en scrip -que diluyen al accionista que decide recibir sus dividendos en efectivo-. Toda la banca ha eliminado los pagos en papelitos con la excepción de Santander, que se ha comprometido a hacer lo propio en sus pagos con cargo a 2019 -actualmente uno de sus dividendos es en scrip-. Esta muestra de buena salud de la retribución del sector en España se ve refrendada por el bajo porcentaje de los beneficios que emplea para retribuir. El payout de la industria se sitúa en el 44 por ciento, 7 puntos por debajo del 51 por ciento de Europa. Es la cifra más baja entre los grandes países de la región con la excepción de Alemania, donde la complicada situación de Deutsche Bank ha reducido sustancialmente sus pagos y donde Commerzbank acaba de anunciar la vuelta a un pequeño dividendo. En concreto, las previsiones apuntan a que el sector logrará este año un beneficio de algo más de 17.500 millones de euros, de los cuales casi 7.700 se utilizarán para retribuir al accionista. Para 2019 se estiman ganancias de más 19.100 millones y pagos por casi 8.600 millones, lo que implicaría elevar el payout en un punto porcentual, al 45 por ciento. "Pueden subir este porcentaje de manera progresiva. Quizás puede llegar a una horquilla del 50 por ciento, que es dónde han estado históricamente", señala Nuria Álvarez, analista de Renta 4. Con todo, Álvarez reconoce que "antes tampoco habían tenido una presión regulatoria como la actual" y cree que "seguirán siendo prudentes en términos de política de retribución". Y es que las normas durante los últimos años han obligado a todo el sector a elevar sustancialmente sus colchones de capital. Esto ha provocado que la banca haya tenido que ser menos generosa en sus pagos o incluso recurrir al scrip -Santander, BBVA y CaixaBank lo han hecho de manera recurrente y Sabadell y Bankinter testimonialmente-, lo que a la postre les ha permitido ampliar capital. Los que menos y los que más Las dos entidades cotizadas más pequeñas son también las dos que menor porcentaje de los beneficios emplean para retribuir. Unicaja distribuye actualmente el 25 por ciento de su beneficio y Liberbank el 20 por ciento. Con todo, ambas se han comprometido a elevar su payout al 40 por ciento en 2020. Asimismo, la rentabilidad de sus pagos también es la más baja, del 1,6 por ciento en el caso de la andaluza y del 1,7 en el de su competidora. Entre los bancos del Ibex 35 el que tiene un payout más bajo es BBVA. La firma tiene como compromiso repartir entre el 35 y el 40 por ciento de sus beneficios en forma de dividendos. Los analistas fijan su payout en el centro de esta horquilla -en el 37,5 por ciento-. Al precio actual, su rentabilidad por dividendo es del 4 por ciento, pero los expertos esperan que con cargo a 2020 se acerque al 5 por ciento de la mano de una tímida mejora del beneficio -del 3 por ciento con respecto a este año- y un sensible aumento del porcentaje que abona al inversor, hasta el 43 por ciento. Mientras, el Banco Santander es el siguiente en la lista, al repartir cerca del 45 por ciento de su beneficio en forma de dividendo. La compañía cántabra tiene el compromiso de incrementar su retribución cada año y de repartir entre el 30 y el 40 por ciento del beneficio, por lo que si las expectativas no cambian el banco superará esta barrera. Con todo, este año finaliza su plan estratégico, por lo que de cara al próximo ejercicio tendrá que revisar su política de retribución. La rentabilidad de sus pagos se sitúa ahora en el 4 por ciento y de cara a 2020 se espera que crezca hasta el 5 por ciento, si bien lo hará mediante un aumento del beneficio, manteniendo su payout en la zona del 45 por ciento los próximos años. Mientras, Bankia y Sabadell sitúan esta ratio en el 46,4 y el 48,7 por ciento, respectivamente. Ambos han presentado recientemente sus nuevos planes estratégicos, el banco catalán prevé situar su payout en el 49 por ciento entre 2018 y 2020 y Bankia entre el 45 y el 50 por ciento en el mismo periodo. En el caso de este último, los analistas creen que será bastante más generoso en el último año de su plan, en el que esperan que distribuya el 57 por ciento de sus ganancias. Finalmente, tanto CaixaBank como Bankinter reparten en torno al 50 por ciento de su beneficio en forma de dividendos. Con todo, ambas entidades se quedan ligeramente por debajo del 51 por ciento que reparte el sector en el Viejo Continente. La catalana tendrá que desvelar su nuevo plan estratégico el año que viene, toda vez que concluye este año el del periodo 2015-2018, en el que se compremetía a abonar el 50 por ciento o más de sus ganancias. Mientras, las declaraciones de la entidad naranja siempre han ido dirigidas a mantener su payout en ese 50 por ciento.