Cerraron el año con 262.847 millones en activos bajo gestiónLos fondos de inversión españoles están de enhorabuena. Y no solo porque, tal como confirmó ayer Inverco, cerraron el pasadao año con nuevo récord de patrimonio (262.847 millones de euros, un 11,7 por ciento más que en 2016 y 2,05 millones de cuentas de partícipes más) sino, además, porque gran parte de la culpa de ese nuevo máximo histórico la tienen las suscripciones netas que los inversores hiceron a estos productos. En concreto, esas suscripciones netas, que fueron de 21.420 millones de euros en un año en el que hubo pleno mensual en lo que a entradas de dinero se refiere, aportaron casi el 78 del crecimiento de 2017, mientras que la otra cuarta parte tiene su origen en la revalorización de los activos de las carteras donde invierten los fondos. A este respecto, conviene recordar que 1.631 de los 2.103 fondos de los que tiene datos de rentabilidad Morningstar acabaron el pasado año con rendimiento positivo, lo que supone el 77 por ciento del total. Además de ser 2017 el gran año de los fondos como producto financiero elegido por los inversores españoles -se nota también en que por primera vez superó al depósito en entradas de dinero neto- también fue el ejercicio en el que esos inversores optaron por aumentar el riesgo de sus carteras ante las nimias expectativas de rentabilidad que ofrece la renta fija en un contexto de tipos al cero por ciento y con perspectivas de cambio al alza en las políticas monetarias de los bancos centrales. Esto se ha visto en que, según Inverco, las categorías que más suscripciones netas recibieron fueron la de fondos globales (12.401 millones de euros), renta variable mixta internacional (4.605 millones millones) y retorno absoluto (4.132 millones), mientras que los mayores reembolsos se vieron en fondos de rentabilidad objetivo, con salidas por valor de 4.288 millones de euros y monetarios, con reembolsos netos de 2.446 millones de euros.