El comportamiento del mercado de renta fija se puede explicar por la abrupta revisión al alza de las expectativas de inflación, motivada por varias razones. La primera es el petróleo, pero no el acuerdo alcanzado por la OPEP, sino el efecto base que ya se viene notando en los IPC de EEUU y Europa. En segundo lugar, la estabilización económica observada desde este verano, que está haciendo menos necesarias las políticas ultraexpansivas de los bancos centrales. El siguiente son las medidas fiscales de Trump, aunque aún no se conoce su alcance. Para continuar, hay que recordar la más que probable subida de tipos en EEUU.