Rebasa esta cifra por primera vez en la historia gracias a los 102.000 millones de septiembreLa actividad corporativa y la elevada liquidez siguen apoyando la llegada de dinero al parquémadrid. Hace unos años era una quimera. Pero hoy es una realidad. La frenética actividad corporativa registrada en las últimas semanas ha permitido que, por primera vez en la historia, las bolsas españolas hayan movido más de un billón de euros en un año. En los doce meses que van desde octubre de 2005 hasta septiembre de 2006 la contratación bursátil ha alcanzado los 1,001 billones de euros, la cifra más alta de todos los tiempos. Este hito, además de llevar a los mercados a superar esa mítica cifra, anticipa que la bolsa puede cumplir este ejercicio su viejo sueño de mover más dinero del que genera la economía española. En los tres primeros trimestres del año, la negociación acumulada ha ascendido a 797.682 millones de euros, según los datos difundidos ayer por la Sociedad de Bolsas. Esa cantidad es un 25 por ciento mayor de la registrada en el mismo periodo de 2005 pasado, por lo que si se mantiene este ritmo hasta final de año la negociación final rebasará de sobra el billón de euros, por encima de los más de 925.000 millones de euros a los que puede ascender el Producto Interior Bruto (PIB) español en 2006. Inyección fundamentalLas increíbles estadísticas que arrojan los mercados españoles son deudoras en gran medida del dinero negociado en septiembre. Durante el último mes se han batido todos los récords que el mercado tenía a su alcance: el de negociación diaria, con los 10.533 millones contratados en la jornada del 26 de septiembre, justo en la que el Ibex 35, el índice español de referencia, marcó un nuevo máximo histórico al cierre en los 12.950 puntos; el de volumen semanal, con los casi 40.000 millones que se movieron entre el 25 y el 29 de septiembre; y el de contratación mensual, puesto que la cifra total ascendió hasta los 102.192 millones de euros, por encima de los 98.408 millones de enero de este mismo año. Este aluvión de dinero ha respondido a los continuos movimientos empresariales vividos durante el último mes. La disputa entre Joaquín Rivero y la familia Sanahuja en la inmobiliaria Metrovacesa o las entradas de Acciona en Endesa y ACS en Iberdrola, principalmente, han situado a estos valores entre los más negociados del mercado, desafiando el habitual predominio del trío formado por los dos grandes bancos, Santander y BBVA, y Telefónica.A su vez, el baile de ofertas y rumores ha actuado como reclamo para los grandes inversores institucionales. De hecho, su apuesta por el mercado español ha sido una de las causas que ha propiciado al Ibex 35 marcar un nuevo máximo. Entorno favorableAdemás, el caldo de cultivo continúa siendo el apropiado para alimentar la negociación. Pese al repunte que están registrando, los tipos de interés permanecen bajos desde una perspectiva histórica en la zona euro, un factor que permite que el dinero con el que pueden contar potencialmente los parqués se mantenga alto. En este sentido, la moderación de los precios de la vivienda y las aún reducidas rentabilidades de la deuda pública -aunque siguen remontando terreno- se suman a la lista de elementos que favorecen la entrada de dinero en las bolsas, puesto que los inversores encuentran más atractivo en la renta variable que en otras inversiones alternativas. Aunque el reciente repunte de las cotizaciones, sobre todo en sectores como el eléctrico, el constructor y el inmobiliario, pueden moderar el apetito bursátil de los inversores, a corto plazo los mercados cuentan con otro aliciente para seguir registrando elevados volúmenes de negociación. Se trata de la lluvia de dividendos que se va a producir en octubre, mes en el que la retribución de las compañías a sus accionistas va a alcanzar los 1.000 millones. Las temporadas en las que las empresas retribuyen a sus accionistas suelen ir acompañadas de fuertes intercambios de dinero en torno a las compañías que los pagan, por lo que la negociación de octubre puede volver a ser alta. El comienzo así lo presagia: ayer la negociación alcanzó los 5.221,2 millones de euros.