A pesar del pésimo comportamiento de la bolsa en lo que va de año, Richard Carlyle, responsable de inversiones de Capital Group, mantiene su firme convicción de que será el activo de inversión estrella del año. Eso sí, el desafío este año vendrá por la dificultad de predecir el comportamiento de petróleo. A día de hoy, ¿cuál es su activo de inversión preferido para 2016? La zona euro se ha ido recuperando lentamente, lo que ha sido ampliamente positivo para la renta variable. Además, creemos que muchas acciones siguen infravaloradas y tienen margen para subir desde los niveles actuales. Por lo tanto, dado que prevemos un crecimiento continuado en la zona euro, aunque a un ritmo lento, somos optimistas respecto a la renta variable para este año. ¿Cuál ha sido el mayor reto al que enfrentó en 2015 y cuál será el mayor este año? El sector energético y de materias primas ha planteado sin duda un desafío para muchos inversores en los últimos 12 meses. La caída del precio del petróleo tuvo un impacto mayor en las compañías del sector energético, mientras que la desaceleración de la demanda de China tuvo impacto en las empresas de materias primas. En Capital Group European Growth and Income Fund mantuvimos la exposición por debajo del índice de referencia en los sectores tanto de la energía como de las materias primas a lo largo de 2015, lo cual fue muy útil para los rendimientos. El desafío clave en 2016 será la dificultad de predecir la trayectoria del precio del petróleo, es algo que vigilamos de cerca. ¿Qué riesgos políticos afrontará el mercado europeo en 2016? El crecimiento de Europa en el segundo trimestre de 2015 fue sólo del 1,5 por ciento. Si no vemos un mayor progreso podría haber una reacción en cadena de efectos negativos. También estamos esperando a ver cuál es el impacto de la reciente subida de tipos de la Reserva Federal de Estados Unidos, las fortunas económicas de ciertas empresas europeas están vinculadas allí, por lo que cualquier desaceleración significativa podría notarse en estas empresas del Viejo Continente. ¿Ha cambiado de alguna manera su cartera después de crisis china? No hemos hecho ningún cambio significativo en respuesta a las circunstancias en China. Desde el punto de vista de los ingresos, ya teníamos una exposición relativamente baja a China y, en general, a los mercados emergentes. Hace unos 18 meses miramos la facturación de las empresas en cartera, un análisis que puso de relieve la elevada proporción de los ingresos de China en el sector de bienes de lujo -el cual redujimos- por lo que hemos sido cautos desde hace tiempo. Por sectores, ¿dónde ve oportunidades de inversión? ¿cuál es el que más pesa en su cartera? Como selectores bottom-up, invertimos en las que vemos las mejores oportunidades, en lugar de tomar una visión top-down, con un foco específico del país. No obstante, tenemos un enfoque basado en los ingresos para invertir. Es lo que llamamos la Nueva Geografía de la inversión, que pone menos énfasis en el país en el que está domiciliada la empresa y más en las regiones donde realmente generan sus ingresos. [sus principales posiciones son Novartis, Imperial Tobacco, Prudential, Barclays y HeidelbergCement y acumula una rentabilidad del 10 por ciento anualizada a tres años]. Y qué es lo que tiene en cuenta en una compañía a la hora de invertir? Buscamos valores que generen importantes ingresos, o que tienen una proporción significativa de los activos localizados en mercados fuera de su país de residencia. También valoramos un historial de pago de dividendos. De hecho, creemos que son muy importantes en este entorno. La atención se centra en identificar no solo las mejores empresas de Europa, sino que también están entre las mejores del mundo. Tenemos la confianza para invertir en todo el espectro de capitalización bursátil, por lo que la cartera del fondo puede incluir compañías de pequeña y mediana capitalización. ¿Cuánto tienen en liquidez? La cantidad de efectivo del fondo puede variar en función de las perspectivas de nuestros gestores [ahora tienen un 5,8 por ciento]. Permitimos que aumenten el efectivo cuando son cautos. Y precisamente esta flexibilidad ha demostrado ser un éxito. El fondo cuenta un historial de protección durante las caídas de los mercados en un periodo consecutivo de tres años; desde su creación en 2002, ha superado al índice de referencia en un 97 por ciento cuando los mercados han sido bajistas.